El parricida tatuador se volvió famoso tras aparecer en una serie filmada en el penal de Tacumbú llamada Inside the World’s Toughest Prisons o Las cárceles más duras del mundo, cuya cuarta temporada fue estrenada el pasado 29 de julio en Netflix. El recluso fue trasladado en el 2019 al Centro de Rehabilitación Social de Itapúa (Cereso).
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A pesar de estar prohibido el uso o tenencia de teléfono adentro de las cárceles, el mismo utilizó un aparato celular y envío saludos a sus seguidores.
En el material audiovisual que se hizo viral, el recluso envía saludos a todos sus seguidores desde el interior del penal de Itapúa, lo que evidenció una vez más la “libertad” que tienen los reos en las cárceles y el nulo control existente.
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Al respecto, el director de la Penitenciaría, Gilberto Fariña, dijo que los teléfonos ya fueron incautados y enviados a la capital del país, como lo establece el protocolo del Ministerio de Justicia.
Sin embargo, está situación dejó evidenciado que varios presos siguen gozando de privilegios y poseen aparatos celulares que son utilizados en el interior del Penal, lo que demuestra que la institución, a pesar de no permitir visitas, sigue registrando ingresos de elementos y productos prohibidos.