A las tranquilas aguas del Lago de la República de Ciudad del Este ha llegado un visitante inesperado y sigiloso que ha conquistado tanto las miradas curiosas como los corazones cautelosos de la gente. Se trata del yacaré hû, un reptil semiacuático que, siendo originario del Chaco, encontró en este lago su hogar. Este singular habitante, un tanto enigmático, ya es parte del paisaje cotidiano de la ciudad y un símbolo vivo de la biodiversidad en medio del cemento urbano.
Aunque este tipo de yacarés no son nativos de Alto Paraná, cada vez es más frecuente avistarlos en el Lago de la República, una aparición que sigue despertando teorías y especulaciones sobre su origen. Algunos residentes aseguran que llegaron desde el río Paraná, mientras que otros creen que alguien los liberó allí, una suerte de leyenda urbana sin pruebas.
Aún sin tener claridad sobre el origen de estos reptiles en el lago, lo que está claro es que se han adaptado con sorprendente éxito a las condiciones de esta área verde, que se convirtió en su refugio y entorno de reproducción. A lo largo de estos años, sin dudas, hoy es considerado la mascota de Ciudad del Este.
En principio los primeros avistamientos causaban sorpresa y cierta alarma entre quienes frecuentan el lago, sobre todo entre aquellos que lo visitan para caminar, trotar o simplemente desconectarse de la rutina.
De hecho, ver un yacaré asomar la cabeza desde el agua o estirarse tranquilamente sobre la vegetación cercana al lago no es exactamente una postal habitual en Ciudad del Este. Sin embargo, con el tiempo, esta criatura se fue integrando a la dinámica del lugar, y su presencia incluso generó una especie de ritual de observación; al pasar por ciertas zonas, siempre hay alguien con la mirada atenta, esperando captar un destello de movimiento o la sombra de su silueta.
MASCOTA
Poco a poco, el yacaré ha pasado de ser un intruso ante la mirada de algunos a convertirse en una especie de “mascota” urbana, uno de esos elementos que parece propios de la ciudad y que cautivan tanto a residentes como a turistas.
Su aparición recurrente ha atraído a curiosos y se ha convertido en una historia local, una anécdota que cada visitante quiere conocer. El hecho de ver a un yacaré en plena ciudad parece añadir un toque exótico y salvaje al paisaje cotidiano, y en cierto sentido, le da a Ciudad del Este una peculiaridad que pocas otras ciudades poseen.
Alrededor del Lago de la República, guardias municipales supervisan y controlan que las normas de protección se cumplan. Su trabajo es doble: Cuidar de los ciudadanos que se acercan, pero también de los yacarés, que en su convivencia con el ser humano enfrentan ciertos riesgos.
Hay quienes ven en ellos un peligro latente, temiendo que puedan atacar en un momento de descuido. Al mismo tiempo, están quienes temen por la seguridad de los reptiles, que podrían ser lastimados por visitantes imprudentes o caer en manos de personas sin escrúpulos.
Desde 2020, la Municipalidad de Ciudad del Este implementó diversas medidas para proteger tanto a los yacarés como a los transeúntes. La valla de protección alrededor del lago se amplió y se instalaron carteles informativos que advierten sobre la presencia de estos animales.
Estos letreros son también una invitación a aprender a convivir con esta especie, resaltando la importancia de no acercarse ni intentar tocarlos, ya que los yacarés, aunque generalmente son tranquilos, pueden volverse agresivos si se sienten amenazados.
CONDICIONES ÓPTIMAS
El Centro de Investigación de Animales Silvestres de Itaipú Binacional ha estudiado las condiciones de vida de estos jacarés, confirmando que el lago ofrece un hábitat óptimo para su supervivencia.
El agua tranquila y la vegetación abundante permiten a esta especie alimentarse y reproducirse en paz.
Según el informe del Centro, estos yacarés son “normalmente tímidos y cautelosos”, y no suelen representar una amenaza si no se ven perturbados. La ley de Vida Silvestre protege a estos ejemplares y asegura que se les respete como parte integral del entorno.
Nadie sabe con exactitud cuántos jacarés habitan en el lago ni cómo han logrado reproducirse tan bien en este entorno, pero ya son parte del paisaje.
El yacaré del Lago de la República, se ha convertido en un símbolo de resiliencia y adaptabilidad, se ha ganado un lugar especial en la historia de Ciudad del Este.
