17 may. 2025

Elefantes hambrientos en Tailandia, las otras víctimas del Covid-19

Los elefantes domesticados no llevan una vida fácil en muchos campos turísticos de Tailandia, donde son entrenados duramente para ofrecer espectáculos circenses, pero ahora el Covid-19 está provocando que no puedan alimentarse adecuadamente.

Elefantes tailandia.jpg

Antiguamente los elefantes domesticados eran empleados en la tala de árboles, pero desde la prohibición de esta actividad en 1989, la mayoría son usados ahora como reclamo turístico.

Foto: Thai Elephant Alliance

El motivo es que han caído los ingresos del turismo en medio de la pandemia y por eso muchos tailandeses se han volcado en una campaña de donaciones que ha recaudado hasta ahora más de 600.000 bat (unos USD 18.000 o 16.500 euros).

Le puede interesar: No usar detergente o hidrogel en perros o gatos, advierten veterinarios

Se estima que hay más de 3.000 elefantes domesticados en Tailandia y la mayoría de ellos se encuentran en centros y parques que viven principalmente del turismo, uno de los motores de la economía tailandesa.

Las campaña de donaciones para ayudar a los paquidermos fue iniciada por la asociación Thai Elephant Alliance, que congrega a diferentes centros turísticos de elefantes, con el objetivo de comprar comida y medicinas para estos imponentes mamíferos.

“Aunque muchos centros de elefantes han tenido que cerrar recientemente por orden de los gobernadores, los elefantes aún tienen que comer a diario”, dijo a Efe Siwawut Munesane, vicepresidente de Thai Elephant Alliance en la provincia norteña de Chiang Mai.

Siwawut precisó que hay unos 2.200 elefantes empleados en el sector turístico en Tailandia, de los que unos 1.100 se encuentran en Chiang Mai.

“Todos los centros y santuarios de elefantes necesitan ingresos ahora, porque tienen que pagar por comida, suplementos, medicina”, aseveró el presidente de la asociación.

Los elefantes, que pueden llegar a pesar más de tres toneladas y superar los dos metros y medio de altura, consume entre 200 y 300 kilogramos de comida al día.

Las autoridades de Tailandia, donde ya hay más de 1.700 casos y 12 muertos debido al nuevo coronavirus, han prohibido la mayoría de las actividades públicas y negocios no esenciales, lo que ha supuesto el cierre de parques y centros turísticos.

También puede leer: Con los humanos confinados, la naturaleza resurge

El país también lleva sufriendo desde finales de enero la drástica caída del turismo, sobre todo de los procedentes de China, el origen del nuevo coronavirus y país del que proceden casi un tercio de los 39 millones de visitantes a Tailandia en 2019.

Wasana Thongsuk, directora del parque y clínica para elefantes Maetang de Chiang Mai, indicó que su centro aloja 64 paquidermos y que, a pesar de que ya no pueden recibir turistas, cuenta con fondos para aguantar hasta septiembre.

“Antes del brote de Covid-19, recibíamos unos 600 visitantes (diarios). Sin embargo, desde que se declaró el brote en Wuhan (China), el número de turistas decreció considerablemente”, explicó a Efe Wasana, que antes del cierre este mes recibía entre 10 y 50 visitantes diarios.

La directora del parque y clínica afirmó que ha tenido que reducir a la mitad los 1.000 bat (USD 30 o 27 euros) que antes se gastaba en la comida y suplementos de cada paquidermo.

Antiguamente los elefantes domesticados eran empleados en la tala de árboles, pero desde la prohibición de esta actividad en 1989, la mayoría son usados ahora como reclamo turístico.

Organizaciones como World Animal Protection han denunciado que muchos de estos animales viven en malas condiciones y son maltratados para llevar a turistas en sus lomos o participar en espectáculos.

Además de los domesticados, se estima que hay otros 3.000 paquidermos salvajes en Tailandia.

Más contenido de esta sección
Un grupo de científicos descubrieron la mutación genética que hace naranjas a algunos gatos. Se trata de una alteración que no se da en ningún otro mamífero y que en su caso está vinculada al sexo, lo que la hace más frecuente entre los machos.
El Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) celebró el registro fotográfico del jagua yvyguy, también conocido como “perro vinagre”, en el Parque Nacional Serranía San Luis, ya que es el primer avistamiento en más de cuatro décadas.
Un fotógrafo logró captar imágenes de cuatro ejemplares del zorro pitoco, perro de monte o jagua yvyguy en el Parque Nacional Serranía San Luis, Departamento de Concepción.
Un curioso ciervo alimentándose de las flores de cerezo fue avistado en su ecosistema por un fotógrafo en Japón, que le realizó varios videos, los cuales se hicieron virales en las redes sociales por recrear un dulce momento.
Un elefante salvaje mató a un hombre de 68 años en la provincia meridional de Chanthaburi, según informaron este jueves las autoridades de Tailandia, que explicaron que la víctima practicaba la caza furtiva, delito por el que había sido sancionado en el pasado.
El momento en el que un conductor arrolló a dos canes que estaban durmiendo en la calle quedó grabado en una cámara de circuito cerrado en Carapeguá. Ambos animales murieron. La Fiscalía solicitó la detención del sospechoso.