El embajador de los Estados Unidos, Lee McClenny, presidió el pasado 6 de junio un acto en la sede diplomática de su país en Asunción para conmemorar el Mes del Orgullo Gay con el izamiento simbólico de la bandera arcoíris, y se comprometió a seguir luchando por la igualdad de las personas. El embajador del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Matthew Hedges, el 17 de mayo último, Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, publicó en el diario ABC Color una columna sobre su condición sexual gay. Contó que comenzó su carrera profesional, dentro de sus expedientes tenía una marca especial para resaltar que era gay, lo que indicaba qué países podía visitar y qué no.
En la reciente fiesta del cumpleaños de la reina Isabel II y del Día Nacional del Reino Unido organizada por la Embajada británica en Asunción, entre los invitados se encontraba doña Iren Rotela, activista por los derechos LGTBI.
“Lo que me llamó mucho la atención aquí en Paraguay es que hay muy pocas personas abiertamente homosexual en la tele, en la vida política, en la vida cultural”, expresó en una entrevista publicada por Latitud 25 sobre el mismo tema. Por primera vez dos embajadores de dos grandes naciones manifiestan con total naturalidad, lejos del acartonamiento del mundo diplomático, un activismo abierto contra la discriminación y a favor de la diversidad sexual.
“Que el Reino Unido tenga como embajador a una persona abiertamente gay es de por sí un indicador elocuente del respeto al deber de no discriminar que rige en las designaciones de funcionarios de ese país. Algo que debería ser normal también en el Paraguay y en cualquier parte del mundo”, valora Óscar Ayala Amarilla, representante de la Coordinadora de Organizaciones de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy).
Recordó que la Coordinadora ha exigido públicamente el reconocimiento oficial del 30 de setiembre como día nacional por los derechos de las personas LGBTI, como una medida destinada a afirmar los principios de igualdad y no discriminación, y para recordar a las víctimas de la represión y los crímenes de odio perpetrados por la dictadura hacia este colectivo social.
En las redes sociales, las actitudes de los embajadores Hedges y Mcclenny provocaron una avalancha de opiniones a favor y en contra. No faltaron los que consideraron una ofensa el izamiento de la bandera arcoíris junto a la de los Estados Unidos, y las expresiones homofóbicas. Pero también opiniones de reconocimiento a sus gestos.
“La diversidad es un derecho humano fundamental. Otra cosa hubiera sido que levanten una bandera con una calavera y dos tibias cruzadas, que es la bandera de los piratas (risas). Pero esta es una cuestión que afecta al ser humano en general”, expresó el senador Miguel Abdón Saguier, que por muchos años integró la Comisión de Relaciones Exteriores en la Cámara Alta.
Dice que es tan normal para un país que adopta el derecho a la diversidad, no solo como derecho positivo, sino como un valor fundamental de la sociedad, realice lo que la embajada de los EEUU hizo en su sede.
“Si alguna persona que tiene esa opción sexual, levanta en su casa la bandera del arcoíris al lado de la bandera paraguaya, es su derecho”, dijo. Escandiliza solo a la “gente mojigata e hipócrita”, remarcó.