“Garantizamos que no faltaría agua potable en el verano, particularmente en la toma de agua cruda del río Paraguay en la planta (de Viñas Cué), ya que se instalaron unidades de bombeo como medida paliativa para subsanar el problema, además de realizar un llamado a licitación de nuevas bombas, con lo cual ya no habrá inconvenientes”, explicó Richard Eurich, jefe de unidad de producción y distribución de la Essap.
Agregó que el plan de contingencia incluye seis unidades de bombeo cedidas por la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), que ahora están paliando el inconveniente por la baja del río, cuyas aguas ya no entran por la compuerta para ir al pozo de succión de la planta.
Eurich informó que las bombas de la planta necesitan un nivel mínimo para trabajar, y por la bajante del río se requieren bombas auxiliares para mantener el buen funcionamiento de la planta, la cual proveerá el servicio sin inconvenientes para Asunción y Gran Asunción.
El funcionario dijo que ya se instalaron tres bombas, de las seis, donadas por la EBY y ya se llamó a licitación para la compra de nuevos equipos por G. 2.000 millones y en breve se adjudicarían.
El lote de la EBY dado a Essap incluye cuatro bombas bibo de 57 kilovatio (kW) con capacidad de bombeo de 1,26 millones de litros por hora, cada una, y dos bombas de 10 kV, con capacidad de 250.000 litros por hora, respectivamente, detalló la EBY. Así, el bombeo emergencial llegará ahora a 5,5 millones de litros por hora. Las bombas se usaron en 2018 en el desagüe de Pilar en la última inundación.