La Itaipú, por medio de un comunicado, apeló al compromiso ciudadano para evitar que se produzcan incendios forestales en áreas protegidas y ecosistemas de la región.
Las recomendaciones para evitar incendios forestales son no arrojar cigarrillos encendidos, no tirar botellas ni vidrios para evitar el efecto lupa con los rayos del sol, no hacer fogatas ni quemar basura y evitar usar fuego para eliminar la cobertura vegetal.
“En caso de que se detecten incendios forestales, es importante comunicar inmediatamente a los cuarteles de bomberos o a las personas encargadas del sitio en cuestión, indicando la ubicación y la magnitud de la quemazón. Se recomienda evitar acercarse al fuego o iniciar el combate debido al riesgo que representa esta acción”, expresó la misiva de la binacional.
La institución también informó que las causas más comunes de incendios en las áreas protegidas de Itaipú, en la zona núcleo de la Reserva Biosfera, son la quema para renovación de pastizales, la quema de desmontes para cultivos, hoguera de excursionistas, y principalmente la acción de pescadores y cazadores furtivos.
Lea más: Paraguay está en riesgo muy alto por impacto de cambio climático, advierten de WWF
“A raíz de estos eventos, se pierden valiosa fauna, zonas boscosas únicas (como el Bosque Atlántico del Alto Paraná), áreas agrícolas y zonas de regeneración natural y artificial mediante reforestación”, señaló la institución.
La preocupación se centra en evitar estos perjuicios al medioambiente, debido a que en los últimos años de sequía se registraron numerosos casos dentro de las áreas protegidas de Itaipú, que incluyen reservas, refugios y franja de protección del embalse.
Los guardaparques y personal designados a las unidades de conservación, con el apoyo de los bomberos de la Binacional y bomberos voluntarios, hacen frente a esta amenaza sobre los recursos naturales en cada evento que se produce.
La Reserva de Biosfera Itaipú abarca más de 1 millón de hectáreas de territorio ubicado en la cuenca hidrográfica del embalse de la hidroeléctrica binacional, en los departamentos de Alto Paraná y Canindeyú. La zona fue declarada reserva de biosfera por la Unesco en junio del 2017.