La ingeniera química Cristina Penayo explicó el uso de las variedades se centrarían más en la obtención de fibras y de semillas. En el primer caso se observa que el principal consumidor es Francia, en cuanto a la semilla, la experta detalló que es muy versátil, ya que se pueden elaborar a partir de la materia prima desde aceites comestibles, productos industriales como pinturas al óleo, barniz, tinta y combustible, hasta jabones.
El ministro de Agricultura y Ganadería, Santiago Bertoni dijo que todavía se debe generar información sobre el rubro antes de lanzar al productor, de manera a no dar un paso en falso que detenga el programa, que en principio tuvo el objetivo de llegar a 25.000 productores en el 2020, meta que no se cumplió.
Por su parte, Sergio Vázquez, funcionario del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca del Uruguay, comentó la experiencia de su país, donde se registraron 75 variedades de cáñamo, de las cuales 12 están protegidas. El año pasado ingresó al país a través de este sector USD 2 millones.
La Cifra
25.000
productores beneficiados planteó el Ministerio de Agricultura y Ganadería con el programa de Cáñamo industrial.