La parroquia San Vicente de Paul fue construida totalmente de piedra en el año 1939, a través de una intensa labor realizada por varones, mujeres y niños que transportaron todo tipo de piedras del arroyo Takuara en sus brazos, sobre sus cabezas y en carretillas para levantar la infraestructura que fue erigida en honor al santo patrono de la comunidad.
Algunos incluso utilizaron carretas para transportar las piedras más grandes del arroyo, que se constituyen en los soportes más visibles en toda la iglesia, que es muy concurrida por los fieles y turistas que admiran su estructura.
La construcción se extendió por más de 11 años, ya que para levantarla requirió de un cuidado muy especial, porque la obra también tenía que ser segura para los fieles. Finalmente, fue inaugurada y hoy en día es muy admirada por todos los pobladores y visitantes.
Cada 27 de setiembre, se acostumbra realizar una gran fiesta patronal, cuya parroquia es limpiada y adornada para recibir a los que quieran formar parte de las celebraciones, novenarios, eventos artísticos y culturales, entre otros.
Muchos sacerdotes cumplieron sus funciones dentro de esta parroquia. Además el lugar ha sido testigo de miles de bautismos, bodas, entre otros sacramentos que forman parte de la religión católica.
Un libro que narra la historia de Independencia, escrito por el padre Óscar Hermosilla, quien también fue cura párroco de esta iglesia, señaló cómo trabajaban los vecinos de la zona para que la construcción de la iglesia fuese una realidad.
Mencionó que en la infraestructura hay mucho sudor y lágrimas de muchas personas que hasta dejaron sus quehaceres particulares para dedicarse de lleno a la labor que hoy en día es una reliquia viviente.
Cuenta con un campanario que fue refaccionado debido a que las termitas habían consumido su estructura de madera hace algunos años atrás, donde se aprecia toda la cordillera del Ybytyruzú.
Anteriormente, el distrito donde está ubicada esta iglesia era denominado como Colonia Independencia y antes de la civilización ya estaba habitado por numerosos grupos de indígenas de las parcialidades Mbyá y Guayakí.
Según los datos, finalizada la guerra, Alemania quedó devastada económicamente; sin embargo, Paraguay tenía muy poca población y, según el ex presidente José P. Montero, faltaba gente para convertir el monte en zona agrícola productiva. Fue entonces que él, a través de su Gobierno, hizo propaganda en Alemania ofreciendo tierras de manera gratuita a los interesados y así llegaron los primeros alemanes a la zona.
Durante la Guerra contra la Triple Alianza, muchos utilizaban estos lugares para esconderse de los ejércitos genocidas y es por eso que no se puede determinar la fecha exacta de la primera llegada de los pobladores foráneos por este territorio.
En el año 1800 llegaron las primeras familias alemanas en un pequeño poblado llamado Muvevo, que hoy se denomina Curuzupé. Los primeros extranjeros en asentarse en la zona fueron los Quellmalz.
Esta comunidad fue elevada a distrito el 23 de junio del año 1955, por Decreto 260 de dicho año.
Independencia es un distrito con muchos lugares turísticos muy concurridos como el Cerro Acatî, Cerro Corá, Salto Mirian Mabel, Granja Francisca, Salto Cantera, Salto Suizo, entre otros.
Además, esta localidad alberga dos culturas: la paraguaya y la alemana, que a lo largo del tiempo se han fusionado logrando mostrarse ante el mundo entero como una comunidad rica en muchas facetas.