19 dic. 2024

En Misiones, apuntalan una antigua escuela ante el peligro de derrumbe

La infraestructura se construyó hace 22 años. Los padres de los estudiantes, de manera anónima, denunciaron la situación precaria de la institución educativa y reclaman la reparación de aulas.

Con dos postes precarios se sostiene parte del techo del Colegio San José Itá Morotî, de Santa Rosa Misiones, a solo semanas del inicio de las clases presenciales y a distancia. Las paredes están ajadas, con humedad, con pintura destruida por el paso de los años. Hay pisos rotos en varias aulas y el techo está con muchas tejas rotos, que los rayos del sol atraviesan e iluminan las salitas de la escuela rural. El colegio tiene 6 aulas y 80 alumnos.

Debido a la precaria infraestructura de la escuela, que está a punto de derrumbarse, los padres de familia denunciaron la situación, de manera anónima por temor a represalias. Comentaron que incluso tuvieron que apuntalar con madera uno de los pilares que ya se quebró. Temen que el techo se derrumbe encima de los alumnos.

“Hace 22 años lo hemos construido los padres de familia, en aquella época la Gobernación de Misiones nos dio el material. Ahora tiene muchas goteras, el piso está roto, las paredes quebradas y tuvimos que apuntalar uno de los pilares para que no caiga la estructura”, expresó con pena y preocupación uno de los padres de familia.

RECLAMO. Hace años, la comunidad educativa recibe promesas de que se construirá un pabellón nuevo. Solicitan que el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) les dé una solución o de los contrario sus hijos ya no podrán estudiar.

“Desde hace 2 años que los representantes del MEC en el departamento, nos prometieron construir un nuevo colegio y solo es promesa, nuestro colegio es el más feo de todas las instituciones que están en la compañía y eso que estamos a solo 11 kilómetros de Santa Rosa”.

Si se concreta la construcción, solicitan que contraten mano de obra de la zona, por ejemplo de algunos padres que son albañiles. “Esperamos que cuando se logre la construcción de nuevas salas, también tengan en cuenta para dar trabajo a los padres de familia de la comunidad, quienes son albañiles, porque las nuevas aulas que fueron construidas para la primaria no dieron trabajo ni a los ayudantes de la comunidad”.

En cuanto al año lectivo 2020 indicaron que fue un año muy difícil, ya que los estudiantes debían buscar señal para poder cumplir con las tareas asignadas y tienen ganas de que este año las clases puedan ser presenciales.

“Por acá la señal aún es un poco complicada, tenemos poco y dificulta mucho a los estudiantes ingresar a internet, necesitamos aulas y que los estudiantes puedan volver a las clases presenciales ellos en su mayoría así lo desean”.

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