Remarcó que dentro de América Latina, la isla fue el único país que desarrolló una vacuna con tecnología propia.
“Pido que nos pronunciemos como Parlasur para que todo Mercosur busque inmediatamente una cooperación con Cuba para Covid, su tratamiento y en todo el campo médico, que será de provecho”, sostuvo Canese.
Además, alegó que se podría extender con otros países, entre los que mencionó Rusia y China, para superar la pandemia. “Sería imperdonable que no intentemos hacer nada”, consideró. “Solicito que se considere y apruebe con urgencia la propuesta que presentamos 32 parlamentarios para un acuerdo estratégico entre Mercosur y Cuba para la producción y distribución de la vacuna Soberana 2”, insistió. “Es el momento de dar un salto cualitativo, el Mercosur tiene los recursos económicos, de lo que carece Cuba; en cambio, Cuba posee la tecnología médica que nuestros centros de investigación no han podido desarrollar por cuenta propia”, explicó.
“Es el momento de superar los prejuicios ideológicos que algunos de nuestros gobiernos, algunos de los grupos de poder, aún tiene”, indicó.
Especificó que en el caso de Paraguay, el Gobierno ya ha propuesto una cooperación con Cuba sobre vacunas.
“El Mercosur no ha tenido una respuesta como bloque. No se buscó el más amplio y equitativo abastecimiento de las vacunas en forma conjunta, si no que cada país ha buscado salvarse por sí mismo”, sentenció.
INEQUIDAD. Canese recordó que el propio secretario de las Naciones Unidas informó que los 10 países más ricos del planeta acaparan el 75% de las vacunas contra el Covid.
“Hasta ahora hay países como Paraguay que no alcanzan la provisión ni siquiera del 1%”, reclamó.
También hizo referencia al papa Francisco, quien en la Pascua pasada, había denunciado la inequidad por parte de los países más ricos.
“Quien maneja las finanzas y el dinero del mundo se salvará antes, y quienes estamos en situación de pobreza o con menos recursos como nuestros países, tendremos que esperar”, dijo.
Sostuvo que tanto las vacunas, así como los insumos médicos y equipamientos para combatir el Covid, deberían ser de acceso universal y gratuito. “Es un derecho humano inalienable, un bien público”, manifestó.