15 nov. 2024

En silencio y con urgencia, surge el nuevo tren de cercanías del Gobierno

El Senado ya tiene en sus manos el proyecto que busca implementar el tren de cercanías entre Asunción e Ypacaraí y el plazo para tratarlo es de 30 días, considerando su remisión urgente.

Dificultad. El plan de tren de cercanías tendrá como principal reto la franja de dominio.JPG

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El Poder Ejecutivo presentó esta semana la solicitud de tratamiento con urgencia según lo dispone el artículo 210 de la Constitución, el nuevo proyecto de tren de cercanías. De esta manera, el presidente Santiago Peña apura al Congreso, que tiene treinta días para analizar la propuesta y la Cámara revisora tendrá otros treinta días para expedirse sobre el asunto.
De hecho, según el presidente de Ferrocarriles del Paraguay SA (Fepasa), Facundo Salinas, la intención es que la ley se apruebe este año, añadiendo que el cronograma estimado establece que en marzo se hará una precalificación de las empresas interesadas en ejecutar el plan. Posteriormente, entre julio y agosto de 2025 se procederá a la licitación, y a finales del próximo año la adjudicación y firma del contrato. La ministra de Obras Públicas, Claudia Centurión, fue consultada el martes sobre el proyecto, pero se limitó a decir que seguía siendo estudiado, aunque por la tarde el documento fue presentado silenciosamente en el Parlamento. “Seguramente allá por noviembre del 2027, esperamos leer titulares como el viaje inaugural del tren de cercanías, en su primer tramo entre Luque y la estación central”, expresó entonces Centurión en el Foro Latinoamericano de Infraestructura.

Por su parte, Salinas recordó que “el trayecto también se mantiene, con la diferencia que le vamos a decir (a la adjudicada que) en estos años del periodo de gobierno su prioridad es Asunción-Luque”. Son 43 km entre Asunción y Ypacaraí. “Es decir, queremos tratar de terminar un tramo, o sea, fasear para no volvernos locos. Entonces, vamos a hacerlo por fase, una primera fase Asunción-Luque, que es la más difícil”, adelantó Salinas.

Más. Salinas añadió que presentaron al presidente de la República un cronograma, detallando que en diciembre terminan las definiciones técnicas del proyecto. “Hay cosas que estamos revisando. El proyecto original tenía 23 paradas, eso nos parece una locura. Las 7 estaciones se mantienen (...). Estamos ajustando la conexión eléctrica con la gente de la ANDE. Una serie de definiciones, cómo tienen que ser las estaciones, etcétera. Donde pensamos cuál es la mejor solución de ingeniería, acá subimos, acá bajamos. Todo ese tipo de cosas”, relató el titular de Fepasa.

Sobre el financiamiento, recordó que la inversión necesaria es de aproximadamente USD 600 millones. “Por un lado, un aporte del Gobierno. Se está pensando un 30% de la inversión, pero no está cerrada, es una discusión que todavía está porque ahí también es el Ministerio de Economía y Finanzas el que busca el mejor financiamiento. Entonces, ahí yo no me meto porque es un tema bien de ellos, pero si hay una decisión de abordar. Se habla muchos de recursos de electromovilidad de Itaipú (...). Y, por otro lado, lo que estamos pensando es que el privado tome deuda para el resto de la inversión, tendría que ir a buscar recursos afuera”, contó.

600 millones de dólares es la inversión estimada para el tren de cercanías entre Asunción y Ypacaraí (43 km).
ALGUNOS PUNTOS DEL PROYECTO.png

Culpan a Corea del fracaso anterior

En la exposición de motivos del proyecto de ley, el Gobierno culpa oficialmente a la República de Corea por el fracaso del anterior proyecto de tren de cercanías para el cual había aprobado raudamente la Ley Nº 7237/2023. “El alcance, las condiciones de financiamiento y la participación integral del consorcio coreano en la implementación del proyecto cambiaron sustancialmente de la propuesta inicialmente presentada en el estudio de factibilidad desarrollado por KIND”, acusa el presidente Santiago Peña en el proyecto de ley.

Añade que en junio de 2024, KIND remitió a la República del Paraguay una propuesta de reestructuración “donde propuso dividir el proyecto en dos fases, limitando su participación a la fase Asunción-Luque y proponiendo que el desarrollo de la subestructura sea responsabilidad del MOPC”. “Esto fue un cambio que modificó las condiciones iniciales de manera considerable y añadió complejidad y riesgo al proyecto”, se lee en el plan.

En el documento que también lleva la firma de la ministra de Obras, Claudia Centurión, se afirma que “esta reestructuración impactó también en el esquema financiero: La propuesta inicial contemplaba la financiación total por parte de KIND, mientras que la nueva limitaba la participación del Economic Development Cooperation Fund (EDCF) al 50% del tramo Asunción-Luque, sin claridad respecto a los plazos, tasas de interés o periodos de gracia”. Hasta ahora, Corea no dijo nada sobre el fracasado plan.

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