Este fue el resumen puntual que hizo el empresario Jorge Samaniego, titular del gremio Cipama que nuclea al sector y de la firma Reimpex. Pintó un panorama más favorable para las ensambladoras de motocicletas y no así para las de automóviles y vehículos utilitarios. “En el rubro de motocicletas tuvimos que cerrar tanto la planta como los locales de venta durante 60 días a partir del 20 de marzo hasta los primeros días de mayo. Desde ese momento, perdimos la producción, las ventas y muchas cobranzas, ya que la empresa da crédito a clientes y distribuidores mayoristas y al consumidor final”, confesó. Comentó que la situación comenzó a cambiar para mejor cuando reiniciaron la producción y volvieron a vender. “Con eso se normalizó en un 90%. Estamos sintiendo hasta ahora una caída del diez por ciento en el consumo. La compra del producto cambió mucho, en el interior no hubo mayores cambios y en las zonas urbanas hubo demanda por los delivery, pero perdimos todas las ventas que serían las usuales para el sector de servicio de eventos masivos, sea restaurantes, para los mozos, la gente que hace la vida de noche”, precisó.
En materia de producción, estimó que estarían cerrando este año con 110.000 motos, de las 120.000 que vienen produciendo, a partir de un promedio mensual de 11.000 motos. Indicó que la meta de este año era llegar a los 140.000 biciclos, pero por la pandemia quedaron sin posibilidad. “Creo que vamos a terminar en 110.000, habiendo esperado un año de 140.000 motos”, recalcó.
Consideró un hecho positivo que las familias estén optando por las motocicletas para ahorrar costos de traslado, dejando sus automóviles en las casas y también así para evitar contagio en el transporte público.
PROBLEMAS. En cuanto al rubro de ensamblado de utilitarios y automóviles, Samaniego apuntó que fue problemático.
“Estamos con serios problemas de ventas, producción y cobranzas. Nuestras plantas, especialmente la que es más renombrada como Reimpex, tuvimos que cerrar prácticamente todo el año. Muy poco pudimos abrir para producir y lamentablemente el plantel de técnicos montadores tuvieron que ser orientados a otras actividades para no perderlos”, enfatizó.
“Compras del Estado no ayudan”
El presidente de la ensambladora de vehículos Reimpex, Jorge Samaniego, afirmó que lamentablemente tuvieron que cerrar por la pandemia la planta de ensamblaje de vehículos cuatro ruedas, debido a la pandemia.
Lamentó que en todos estos años no hayan tenido la ayuda del Estado que es un gran comprador de vehículos, pero excluye a las de producción nacional en sus licitaciones.
Indicó que la demanda cayó grande tanto en utilitarios como en automóviles. Subrayó que las instituciones públicas siempre excluyen de sus listas a la producción nacional con especificaciones en los llamados que solo dejan la posibilidad de cumplir a ciertas marcas importadas, pese a que hemos tenido excelente experiencia en algunos casos con nuestros vehículos”.
Recordó también que en el programa de un auto 0km para la gente con créditos del Banco Nacional de Fomento (BNF), no llegaron a vender ni el 1 por ciento de los que se vendieron. Dijo que “curiosamente” se extraviaban las carpetas.