Jornada de victoria para Britney Spears, pues su padre dejará de ser su tutor legal de manera inmediata después de más de 13 años y la Corte Superior de Los Ángeles programó una vista el 12 de noviembre en la que se pondrá el punto final a la custodia. “Es un buen día para la Justicia”, afirmó el abogado de la cantante, Mathew Rosengart, a la salida del juzgado, tras una sesión de más de tres horas en la que la jueza Brenda Penny accedió, por primera vez, a todas y cada una de las peticiones de Britney. La magistrada calificó de “tóxico” el control del padre, Jamie Spears, sobre su hija y ordenó la suspensión con efecto inmediato. “Creo que la suspensión de Jamie Spears como tutor es lo mejor para los intereses de la tutelada”, aseguró ante la escucha atenta de decenas de periodistas en el interior de la sala y casi medio millar de personas en la puerta de los juzgados. Rosengart fue contratado como nuevo abogado de Britney, gracias a una autorización de la jueza.