Los actos de violencia en el juego suspendido entre Cerro Porteño y 2 de Mayo, el pasado lunes, siguen generando repercusiones, por lo que la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF), tomó una primera postura, a la espera de lo que pueda resolver el Tribunal Disciplinario que se reúne hoy.
En el comunicado emitido ayer, la APF expuso que “condena de manera enérgica los vandálicos y repudiables sucesos acontecidos anoche en el estadio Defensores del Chaco, hechos que solo dañan de manera inconmensurable al fútbol y a su esencia y que violentan los principios que sustentan este deporte”.
La nota añade que “somos conscientes de que lo sucedido es un problema de fondo, que parte desde la delincuencia y desde el submundo generado por el consumo de drogas y el microtráfico, cuya influencia lastimosamente llega igualmente hasta nuestros estadios”. En el texto, la APF además expuso: “Para erradicar la violencia del fútbol, planteamos darle continuidad y una mayor fuerza al trabajo interinstitucional entre los órganos del Gobierno Nacional y de la APF.
MAYORES CONTROLES. Javier Díaz de Vivar, vicepresidente de la APF, en charla con Fútbol a lo Grande (1080 AM) puntualizó: “Aquí debemos erradicar esto y tenemos que tomar medidas. Debemos castigar de forma ejemplar lo que pasó en el estadio Defensores, hasta a su capitán (Diego Churín) agredieron, esto no puede continuar así”.
El dirigente además apuntó: “Tenemos que llegar a que las entradas sean nominativas y el control de la policía debe ser estricto”. Finalmente, añadió enfáticamente: “Hay que cortar esto definitivamente, no más drogadictos y delincuentes en nuestras canchas, y empezar a dar pasos seguros y determinantes camino a un fútbol más seguro”.
Pérdida de puntos
La normativa de la APF señala en el Artículo 73 que “será causal de la pena de pérdida de los puntos en juego, la imposibilidad de hecho de la prosecución de un partido, producida por el público de uno de los equipos en competencia. Los puntos en disputa serán adjudicados al equipo oponente”.