En cuanto a los motivos de esta situación de escasez, surge que la cementera estatal solo puede cubrir alrededor del 60% del consumo general; otra parte no está siendo atendida por la cementera privada Yguazú, también hay dificultades para importar y la extrema bajante del río Paraguay complica el transporte del producto.
En conversación con ÚH, el ingeniero Paul Sarubbi, titular de la Cámara Vial Paraguaya (Cavialpa), confirmó que ya hay escasez y que sería consecuencia de que la cementera Yguazú, una de las más importantes, está parada y no está produciendo, mientras la INC informó que está despachando de manera habitual. “Después está el problema del río, que está muy bajo e inclusive también afectando el transporte de clínker de la INC desde Vallemí hasta Villeta. Casi no se puede navegar. Y los importadores están con dificultades para conseguir cemento”, precisó.
Añadió que no se sabe si los importadores van a poder conseguir cargar y traer vía fluvial de Bolivia, ni de Brasil. Indicó que en este último país el consumo está muy alto y la frontera complicada, “todo se hace más lento vía terrestre y en Uruguay hay para cargar, pero está más caro”.
Consultado si tiene información respecto a si el faltante está incidiendo en los precios, apuntó que de 55.000 guaraníes la bolsa ya subió a 58.000 guaraníes, pero que todo esto depende de cada depósito de material. En cuanto a la necesidad para las obras viales, refirió que ellos compran directamente de la INC donde dependen de un listado para ir recibiendo las bolsas.
Según denuncias en Twitter, la bolsa de cemento al público estaba ayer a G. 65.000 la bolsa.
REFORZADO. Por su parte, el presidente de la INC, Ernesto Benítez, dijo que están reforzando la producción desde que Yguazú paró porque tuvo problemas la semana pasada y comunicaron a sus clientes esta situación.
Coincidió en que la escasez se da porque la importación tiene problemas para conseguir el producto en los países vecinos por causa de la pandemia. “La INC está produciendo normalmente y así tenemos que en junio despachamos un promedio de 50.000 bolsas diarias, en julio 49.000 y en lo que va de agosto incluso llegamos al pico de 60.000 bolsas despachadas en un día. Vamos a poder mantener un promedio de cincuenta mil bolsas durante los próximos 15 días”, precisó
También puntualizó que la cementera no varió el precio de sus productos y, por ende, no existe motivo alguno para que los distribuidores lo aumenten. Puntualizó que la bolsa de cemento puzolánico está a G. 39.800 la bolsa en planta, el de tipo CP 40 está en G. 43.500 y el cemento de albañilería que viene en bolsas de cuarenta kilos está a G. 29.800. Benítez dijo que ante esta situación que se está planteando en el mercado “quizás una recomendación poco feliz sea pedir el replanteo de los cronogramas de los que tienen obras”, enfatizó.
Antecedentes con perjuicios al mercado
Uno de los antecedentes de escasez de cemento que derivó en una especulación fue a fines del 2010 y principios del 2011, bajo la administración del liberal Optaciano Gómez Verlangieri en la INC.
Los reportes de esos años señalan que la especulación se debió a manejos irregulares de la cementera estatal en la distribución del producto y que llegaron a triplicar el precio de la bolsa de cemento.
Una investigación realizada por ÚH reveló que las bolsas de cemento de la cementera estatal eran comercializadas hasta en gomerías y solo depósitos de materiales de allegados políticos y parientes recibían el producto. En los lugares recorridos fueron adquiridas bolsas con precios de G. 75.000, G. 90.000, G. 105.000 hasta G. 125.000.