Al centro educativo ingresan diariamente unos 300 niños para estudiar. La construcción se muestra antigua y las precariedades forman parte de la malla curricular, según Hugo Céspedes, miembro de la Comisión de Preservación del Cerro Ñemby.
Céspedes sostiene que la escuela ya recibió cierto presupuesto del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide) pero que, a pesar de ello, las condiciones edilicias son las mismas y el riesgo se muestra latente.
“Unos 300 niños son los que asisten al colegio que, debido a las rajaduras en paredes, pueden ser víctimas incluso de un derrumbe”, denunció el hombre en contacto con la 970 AM.
Sostiene que las condiciones edilicias actuales de la escuela en cuestión podrían ser una consecuencia de las explosiones en el Cerro Ñemby, ya que se ubica a unos 200 metros del sitio. Afirmó que ninguna autoridad tomó cartas en el asunto aún.