Si bien algunas instituciones educativas serán reparadas, según lo anunciado por las autoridades a fin de año, sigue siendo ínfimo el trabajo con relación a la cantidad de escuelas y aulas que presentan un deplorable estado, especialmente en el interior del país.
Por ejemplo, al menos 17 instituciones educativas en el Departamento de Paraguarí no podrán iniciar clases debido a graves problemas estructurales. Edificios emblemáticos se encuentran afectados, presentando daños en techos, estructuras y paredes, sumados a filtraciones causadas por desastres climatológicos recientes, como la caída de árboles sobre las instalaciones escolares.
Recursos insuficientes. El intendente de Yaguarón, Luis Rodríguez, dijo a Telefuturo que con apenas G. 500 millones al año de Fonacide, solo pueden atender a 5 o 6 instituciones educativas básicas. La limitación de recursos impide abordar de manera integral los problemas en las 31 instituciones. Asimismo, la escuela básica 152 San Roque de Santa Cruz, de San Ignacio, Misiones, tiene seis aulas sin utilizar tras un derrumbe ocurrido en 2023. En pésimas condiciones está la Escuela Las Mercedes, en Coronel Oviedo. No tiene baño, solo una precaria letrina sin techo que todos los alumnos deben usar. Cipriana Castillo, directora, dice que todos los años urge baños sexados, pero no hay respuesta municipal.
El año pasado, el MEC adjudicó el relevamiento de infraestructura en más de 300 instituciones por 1 millón de dólares. Lo que fue cuestionado por el director Miguel Marecos, quien señaló que eso fue innecesario porque los directores hace 10 años vienen presentando un informe de microplanificación sobre la situación de infraestructura. Según este informe sobre 7.800 instituciones, hay 11.893 aulas a reparar, 249 aulas con peligro de derrumbe, de las cuales 34 son galerías con 3 o 4 aulas; 2.855 sanitarios en malas condiciones, 438 con baños letrinas, 157 instituciones sin agua potable y 140 no cuentan con energía eléctrica.