El presidente de la Industria Nacional del Cemento (INC), Ernesto Benítez, denunció un esquema de robo de cemento a gran escala que funcionaba dentro de la estatal con la complicidad de varios funcionarios.
Benítez estimó que el esquema de robo de cemento que operaba en la INC sustraía unas 600 bolsas (en una carga de camión) en un promedio de cinco veces a la semana. Sostuvo que esto producía en promedio una perdida G. 150 millones de manera semanal, mínimamente.
“Nosotros hicimos un muestreo realizado de una semana y en los tres días que revisamos en los tres días encontramos es por día prácticamente. Hay versiones que dicen que era tres veces a las semana, pero nosotros en tres días encontramos cuatro cargas, pero como la verificación es lenta promediamos a cinco por día”, detalló.
Una carga de 600 bolsas de cemento tiene un valor cercano de G. 30 millones por lo que multiplicado a la semana resultaba en una pérdida de G. 150 millones, lo que en el mes significaba G. 600 millones.
“De acuerdo con la versión de uno de los funcionarios que admitió el hecho, el esquema funcionaba de manera regular desde hace aproximadamente un año, aunque esto aún no fue constatado”, indicó.
Si se calcula el promedio de pérdida mensual por el periodo en que se sospecha funcionó dicho modus operandi se tiene una cifra cercana a los G. 7.200 millones, lo que sería USD un millón anual.
Según Benítez, el modus operandi era utilizar una factura de compra de cemento legal para poder ingresar a la planta para el retiro del producto. Una vez adentro se generaba un código para retiro de cemento, posteriormente, se realizaba la comprobación de los documentos y procedía expedir una orden de carga asignada.
Cuando finalizada el simulacro de compra de cemento y el camión salía de la planta con la carga, un funcionario de la INC se encargaba de eliminar el registro con lo que se borraba la evidencia de la carga despachada.
De esta manera la carga de cemento se habilitaba para su retiro, pero al salir de la planta dicho retiro no se registraba en el sistema y la factura podía volver a ser utilizada con toda validez.
Al respecto dijo que se debe investigar si empresas externas facilitaban las facturas y participaban del esquema o las mismas eran utilizadas por los choferes y funcionarios de la INC en desconocimiento de las empresas.
Benítez afirmó que el borrado del ticket igual quedaría registrado en un soporte donde se tendría almacenado todaos los detalles de la información con precisión.
Esquema tenía una estructura jerárquica
Según el tituar de la INC, Ernesto Benítez, del esquema de robo de cemento participan un funcionario del área de expedición de carga, entre uno o dos basculeros, uno o dos encargados de depósitos de bolsas, también los encargados de la embolsadora; personal de vigilancia.
Por el momento todos los implicados serían del área operativa, aunque no descartó que más funcionarios puedan estar vinculados al robo de cemento
“Nuestro número estimado son unas 10 personas, pero pueden ser más. Se nota que existía una estructura jerárquica”, sostuvo.
Intervención fiscal y policial
Una comitiva fiscal-policial se constituyó en la planta de la INC, en la ciudad de Villeta, ayer tras la denuncia realizada por el titular de la estatal debido a un control donde saltaron faltantes de bolsas de cemento.
El caso fue designado a la fiscala Ruth Benítez, quien encabezó el operativo y señaló que ya se tiene en la mira a los seis, de ocho funcionarios.
El comisario Diosnel Alarcón, jefe del Departamento de Cibercrimen de la Policía Nacional, dijo que con la verificación se descubrió que los camiones que partían desde la planta no coincidían con las imágenes de circuito cerrado en los despachos.