Hace un par de semanas, de hecho, los senadores habían aprobado casi a tambor batiente una iniciativa legislativa de reprogramación presupuestaria de G. 3.500 millones, de los cuales G. 2.500 millones se pretende destinar a la Caja de Jubilados.
Ahora la propuesta está pendiente de la aprobación en la Cámara de Diputados para que se pueda remitir al Ejecutivo, en donde probablemente se promulgaría.
Esta picardía política legis-lativa abrirá las compuertas para que nuevamente el Congreso recupere el 7% del aporte estatal a la Caja parlamentaria que se había dejado sin efecto en el 2018.
En esta ocasión ni siquiera se puede mandar al frente al bloque oficialista, ya que abiertamente algunos referentes de la oposición se manifestaron a favor, alegando que no implicaría un aumento.
El tema es que se tendría que incluir ya dentro del Presupuesto General de la Nación (PGN) para el 2025, en el caso de que haya sanción y promulgación de la ley.
Lo que generó más polémica fue el hecho de que hayan utilizado como argumento para defender la propuesta que consideran al ciudadano como “su patrón”, y como tal le corresponde pagar un porcentaje.
Cabe recordar que hasta el momento hay alrededor de 280 jubilados, incluidos también pensionados, que son los viudos y las viudas.