“Ahora mismo seguimos con los tres turnos, pero con menos cuadrillas que están en la parte de caños rotos, porque otras cuadrillas se están dedicando a otros trabajos, como extensión de cañerías, interconexiones, apoyo a la gerencia comercial para mejorar la recaudación, entre otros trabajos que venimos haciendo”, señaló el gerente.
La reparación de caños, sostuvo, ahora es en promedio entre 90 y 100 lugares por día, mientras que durante la campaña se llegó a reparar hasta 170 en cada jornada.
Pese a llegar a la meta con la campaña, los reportes de averías son persistentes, tanto en la capital como en ciudades de alrededores. Todos los días, la Essap recibe un promedio de 120 reclamos por casos de caños rotos en la vía pública, detalló Amarilla.
Estos problemas recurrentes son por varios motivos, explicó. Como las tuberías obsoletas, la poca profundidad de instalación y la presencia de aire en las redes. La reparación de cada caño roto cuesta entre G. 600.000 y G. 700.000, mientras que los gastos anuales en este rubro ascienden a G. 50.000.000.000, según el ente.

El presidente de la Essap, Luis Fernando Bernal, había declarado que se requiere una inversión de al menos G. 150.000 millones para renovar al menos 300 kilómetros de red de distribución de cañerías obsoletas en Asunción, del total de 3.300 kilómetros que se tienen. Prometió que se ejecutaría durante su administración.
CUADRILLAS. Actualmente, la Essap cuenta con 110 funcionarios entre cuadrilleros, encargados, supervisores, operadores de máquinas. Amarilla indicó que necesitan un refuerzo de al menos 30 personas más, y con el perfil requerido para el trabajo operativo. “Hay una serie de requisitos que se deben cumplir para reforzar el sistema de equipo humano existente. Debe estar en un buen estado físico para mantenerse en una zanja mucho tiempo y debe tener la flexibilidad para las reparaciones subterráneas que hacemos ahora”, detalló.