La ex contadora de Óscar González Daher y de su hijo, Óscar González Chaves, declaró ayer en el juicio oral, por resolución de los jueces del caso. La semana próxima sigue con dos pericias más, antes de entrar en los alegatos.
La testigo Nelly Colarte dijo que fue contadora de los acusados entre el 2015 al 2018. Explicó que por problemas con Seprelad la empresa Príncipe Di Savoia no tenía cuenta corriente bancaria.
Además, detalló las utilidades de la firma. En el 2011 tuvo rentabilidad por G. 14.958.272; en el 2012, G. 11.049.543; en el 2013, G. 11.305.067; en el 2014, G. 16.256.521; en el 2015, G. 17.996.390. Sin embargo, en el 2016 fue de G. 488.966.315 y en el 2017 ya trepó a G. 1.365.041.168; y en el 2018, fue de G. 842.546.331.
Según el defensor, no había problemas con la Seprelad, sino solo trámites que completaron luego. Sobre las ganancias que tuvieron alza del 2016 al 2018, alegó que antes hicieron obras y compraron inmuebles, y esos años ya no tuvieron tantas inversiones, por lo que subieron las ganancias.
Luego declaró el perito Mario Duarte y juró luego el consultor William Fleitas. Los jueces señalaron que la próxima semana se producirán las dos últimas pericias en la causa, para luego ir a los alegatos.