Desde el entorno presidencial admiten ahora que el mejor camino es la renuncia, pero que es una cuestión que depende de una decisión personal de Cárdenas.
Uno de los respaldos más fuertes que tiene el ex intendente en el oficialismo es el del diputado Hugo Velázquez, titular de la Cámara Baja.
Tanta es su amistad con el legislador que logró ubicar en el año 2013, apenas terminadas las elecciones generales, a sus hijos Roberto Mauricio y Mariana Cárdenas Fleitas como funcionarios en Diputados. Mariana percibe un salario de G. 4.500.000 al mes, mientras que Roberto Mauricio G. 3.300.000.
Hasta la casa de Cárdenas en el barrio San Isidro, fue en muchas ocasiones lugar de encuentro de los dirigentes del oficialismo.
El ex jefe comunal es conocido por las irregularidades en su gestión con el uso del dinero del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide). Tiempo atrás, siendo miembro de la Organización Paraguaya de Cooperación Intermunicipal (Opaci) fue uno de los que encabezó las movilizaciones de los intendentes que exigían al Gobierno la transferencia de esos recursos.
Su imputación por lesión de confianza tras el derrumbe del techo del Colegio Nacional de Lambaré, hecho bajo su administración, despertó el descontento de la ciudadanía que se manifiesta solicitando que vaya a prisión y deje de ser candidato. El monto asignado para la obra fue de G. 69 millones, pero el Municipio desembolsó la suma de G. 266 millones que forman parte del Fonacide.
Los lambareños consideran que con el derrumbe “se destapó la olla” de toda la mala gestión realizada en los 10 años que estuvo Cárdenas al frente de la Municipalidad.