- Robert Figueredo
- CAAGUAZÚ
Debido a que los dos ómnibus –que se usan como transporte universitario municipal– presentaban numeración de chasis y motor adulterados, el actual intendente Erminio Rojas de la Asociación Nacional Republicana (ANR) denunció el caso en la Fiscalía de la ciudad de Curuguaty, Departamento de Canindeyú.
La compra se habría verificado en la anterior administración municipal de Yby Pytá, correspondiente a Rubén González, del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), según la denuncia.
Por los buses de dudosa procedencia se habría desembolsado la suma de G. 670 millones. El vendedor entregó facturas de compra para justificar la transacción comercial. El proceso está a cargo de la fiscala Elvia Chávez, quien imputo al ex intendente Rubén González y a otros funcionarios por el caso.
Esta venta se habría verificado en el año 2019 bajo la administración del anterior intendente de Yby Pytá, Rubén González, que alegó que la denuncia tiene “tinte político” y que cuentan con los documentos.
Los G. 670 millones fueron justificados con dos facturas. Un ómnibus costó G. 300 millones y el otro G. 370 millones.
BAJO LA LUPA. Llamativamente, la empresa vendedora, Itá Poty SA, tiene como actividad construcción de obras públicas, desarrollo de programas de merienda y almuerzo escolar, explotación de canteras y comercialización de vehículos al por menor, según la descripción en la factura.
Luego de conocerse el peritaje policial sobre la adulteración y la falta de cédula verde del ómnibus, el actual intendente de Yby Pytá, Erminio Rojas, del partido colorado, presentó la denuncia fiscal y procedió a la entrega del rodado.
Como el bus representa una necesidad para el traslado diario de unos 50 universitarios, la Municipalidad de Yby Pytá solicitó ser depositario judicial mientras continúe el proceso investigativo.
La Fiscalía ya solicitó las documentaciones a la empresa que vendió los ómnibus a la Municipalidad.