En diálogo con la 1080 AM, el ex titular del Fisco, Santiago Peña, recordó que cuando se implementó la matriz salarial en el 2015 se cerraron las ventanas que ocasionaban una distorsión salarial en el sector público, mediante ajustes a los niveles presupuestarios que permitieron unificar sueldos y bonificaciones.
Sin embargo, prosiguió, estas nuevas gratificaciones que van apareciendo están volviendo a abrir esas ventanas y van perforando dicha matriz.
Apuntó a instituciones como el BCP, BNF o Petropar como las que iniciaron este procedimiento, ya que se financian con recursos provenientes del cobro de tasas especiales (Fuente 30) y no están sujetas a fuertes controles por no recibir fondos generados vía impuestos (Fuente 10). “El primero que se entera de estos pagos es el funcionario de Hacienda, porque autoriza los pagos. Entonces ellos reclaman también. Son ventanitas que cuando pasa el vendaval de críticas se vuelven a abrir”, expresó.
Cuestionó también que estos pagos se hayan dado en un año de recesión y en puertas de una reforma tributaria, lo que no genera confianza.
Contradicción. Por su parte, el directivo de la Cámara de Anunciantes del Paraguay (CAP), Rubén Ramírez, coincidió con Peña en que estos pagos de fin de año están distorsionando la matriz salarial, pero además, amplían la brecha salarial entre el sector público y el privado.
Señaló que esto genera preocupación en el sector privado, ya que nuevamente se desnuda el manejo poco serio de la cosa pública.
Criticó la contradicción del Gobierno, ya que por un lado pidió al Congreso un presupuesto equilibrado para el 2020 y su autorización para ampliar el déficit fiscal por falta de ingresos, pero días después termina pagando gratificaciones que no se adecuan a ese discurso de austeridad.
Pese a ser un año de recesión y caída en la recaudaciones, el Gobierno de Marito no pudo frenar el festival de gratificaciones. Hasta el momento, ya se liberaron fondos por USD 1,4 millones y están pendientes de autorización otros USD 11 millones.
Petropar. El festival de pagos extras arrancó en la petrolera estatal, Petropar, la semana pasada cuando los funcionarios permanentes recibieron el equivalente al 50% de su salario en concepto de aguinaldo extra y 40% los contratados. La empresa desembolsó unos 3.500 millones para cumplir con las exigencias de los funcionarios. Los administradores de Petropar dijeron que solo cumplieron el contrato colectivo.
Las Cifras
1.400.000 dólares ya desembolsó el Ministerio de Hacienda para pagar el subsidio familiar y alimenticio a sus funcionarios.
11.000.000 de dólares están pendientes de liberación del Tesoro, tras el pedido hecho por una veintena de entidades.
2.212 millones de dólares ya gastó el Estado en salarios y beneficios ligados en lo que va de este 2019.
El subsidio ocasional fue instalado en la era Cartes
Este pago del subsidio familiar ocasional, en reemplazo del impopular aguinaldo extra, fue hecho por primera vez en diciembre del 2017 durante el Gobierno de Horacio Cartes, cuando la ministra de Hacienda era Lea Giménez.
Pese a que seguía la prohibición por decreto, en esa ocasión, el festival de gratificaciones le había costado al Estado unos USD 11,5 millones y benefició a 17 instituciones, según los informes oficiales del Tesoro.
Estos pagos se hicieron a días de la realización de las internas presidenciales dentro del Partido Colorado, donde el ex ministro Santiago Peña era el candidato por el movimiento Honor Colorado.
Finalmente, Peña perdió esas elecciones ante el actual titular del Poder Ejecutivo, Mario Abdo Benítez.