Canese subrayó que “tiempo es dinero” y que la indefinición conviene a Brasil, país al que Paraguay cede energía a precios bajos en relación con los valores de mercado. Hay que recordar que el Entendimiento entre el Paraguay y el Brasil sobre directivas relacionadas con la energía de Itaipú Binacional estableció que “las altas partes se comprometen a concluir la revisión del Anexo C del Tratado de Itaipú antes del 31 de diciembre de 2024”. Sin embargo, aparentemente este plazo se extenderá en principio por seis meses.
“Tiempo es dinero. Cuanto más se dilata la negociación, mejor para el Brasil porque nos sigue pagando un precio miserable por nuestra energía (...). Me parece que acá parte de la estrategia es no tener un resultado (...). Cada día que pasa le estamos regalando energía a Brasil”, criticó la ex viceministra.
Canese reconoció que es indudable que la mejor opción es utilizar la energía en Paraguay, “pero no de cualquier forma, porque la criptominería ni siquiera nos paga lo que Brasil”. “Estamos pagando la diferencia en peor calidad de servicio y en algún momento también con aumentos de tarifa”, advirtió. Insistió en que el deterioro de la calidad del servicio se percibe, especialmente en el verano pasado porque además de utilizar mucha potencia generando más cortes, las criptominerías también generan distorsiones armónicas en el sistema eléctrico que producen variaciones en la tensión, que afectan especialmente los equipos electrónicos.
El ingeniero Fabián Cáceres, ex gerente técnico de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), había opinado que “es evidente” que se postergarán las negociaciones por la revisión del Anexo C, considerando que a prácticamente dos meses del plazo no hay avances o información. Dijo que Brasil no tiene interés en avanzar en las negociaciones y Paraguay debería estar interesado. “Deberíamos estar remitiendo notas, cuanto menos manifestado nuestro interés en reunirnos”, indicó.
Cáceres también manifestó que Paraguay debe revisar si conviene seguir cediendo la energía a Brasil o consumirla para desarrollar la industria en el país. Hasta ahora no hay respuestas del canciller Rubén Ramírez Lezcano ni del ministro de Industria sobre el tema.
20 unidades generadores de 700 MW tiene la Central Hidroeléctrica Itaipú, alcanzando 14.000 MW de potencia instalada.