21 dic. 2024

Excesivo valor impositivo redujo a ruinas Centro Histórico de Asunción

Edificios y casas abandonadas por doquier con su infraestructura bastante deteriorada, muchos de ellos catalogados como patrimonio, pintan el triste panorama que se tiene hoy día en el Centro Histórico de Asunción, que paradójicamente tiene la categoría de zona más cara de la ciudad.

En el 2002, este sector capitalino tenía 31.746 habitantes, cifra que diez años más tarde, en el 2012, se redujo a solo 6.928, quedando en áreas ribereñas 10.761 familias, lo que revela que la población de esta porción de la ciudad está constituida por gente económicamente vulnerable y en situación de pobreza.

Esto se debe al elevado costo del impuesto inmobiliario, que por metro cuadrado asciende a G. 401.511, cuando en la zona 1 de municipios como Fernando de la Mora, Luque, San Lorenzo, Roque Alonso, Limpio y Capiatá el valor impositivo solo asciende a G. 50.469.

La propuesta de congelar este tributo por diez años en Asunción, que en promedio sube 4,5% anualmente, será analizada en una mesa de diálogo con representantes de distintas direcciones de la Intendencia, que será sugerida por el actual presidente de la Junta Municipal, concejal Óscar Nenecho Rodríguez. “En esa mesa analizaremos institucionalmente este proyecto, que creemos es viable”, sostuvo.

Indicó que también verán otras alternativas, como la reducción de las tasas de servicios, trabajando eso en la Ordenanza Tributaria, y otras medidas que tornen atractivo volver a vivir en Asunción.

“Aquí hay dos situaciones: la gente que sigue viviendo en la capital, pero tributa en las ciudades dormitorio por patentes o registros, y el éxodo de contribuyentes que no pueden pagar un impuesto inmobiliario tan alto. Ambos casos debemos revertir”, concluyó.

drama. La ex intendenta Evanhy de Gallegos indicó que lo que se paga en el centro asunceno es ocho veces más de lo que se abona en Central, razón por la cual las familias se mudaron a ciudades a las cuales no les alcanzan los servicios, ya que carecen de red cloacal, calles asfaltadas y cuentan con las llamadas villas miseria.

“Darle al centro el más alto valor impositivo ignoró que los edificios históricos también pasaron proporcionalmente a abonar el canon mayor. Aun cuando su conservación edilicia fuera más gravosa tenían imposibilidad de crecer en altura. Si no creces, cómo pagas en la zona más cara”, dijo.

Puntualizó que “el valor de esta zona, por su alto costo, estimula la piqueta, que es la práctica de algunos propietarios de tirar abajo ex profeso el edificio”.

La gente prefiere sufrir el caótico tráfico metropolitano que vivir aquí y pagar impuestos caros Óscar Rodríguez, concejal.