En un informe publicado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), los meteorólogos predicen temperaturas en las masas continentales superiores a la media hasta noviembre, especialmente en el hemisferio norte, pese a que La Niña suele producir un enfriamiento del suelo oceánico, sobre todo en el Pacífico.
“Cambios en el clima inducidos por la actividad humana están amplificando el impacto de eventos naturales como La Niña, lo que influye cada vez más en los modelos meteorológicos, especialmente en forma de más calor y sequías o inusuales lluvias e inundaciones”, advirtió el secretario general de la OMM, Petteri Taalas.
El responsable de la organización recordó que las sequías y olas de calor han aumentado los incendios forestales, como este verano ha podido verse en el Mediterráneo y en California (EEUU), entre otras áreas.
“En los últimos meses hemos visto el efecto devastador y trágico del cambio climático en casi todas las regiones del planeta, donde aumenta la gravedad y la frecuencia de los desastres”, aseguró el experto finlandés.
Taalas concedió que los sistemas de alerta temprana y gestión de desastres han mejorado en los últimos años, reduciendo el coste en vidas de muchos desastres, “pero su impacto socioeconómico y humanitario sigue aumentando en forma de más inseguridad alimentaria, migraciones y posible descontento social”.