En un mural de un pequeño municipio de Brasil sobresale el rostro vívido de una mujer negra. No es una pintura común. Las hojas de un frondoso cerezo semejan el cabello de esta joven retratada por un humilde grafitero, cuya obra empezó a dar la vuelta al mundo gracias a una actriz de Hollywood.
Septiembre 20, 2020 09:49 a. m.