De acuerdo al fiscal Rodolfo Colmán, el niño tenía moretones, heridas antiguas y recientes en todo el cuerpo. Mencionó que aparentemente lo tironeaban de la oreja constantemente y también presentaba posibles lesiones que hacen sospechar fuertemente de un abuso sexual.
Describió un triste ambiente en el Hospital de Carmen del Paraná, donde las enfermeras lloraron al recordar el caso de la niña de 2 años y 4 meses que el sábado pasado fue recibida en el Hospital de Coronel Bogado, ya sin signos de vida como consecuencia de una agresión sexual.
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La madre tiene 21 años y había sido detenida en las primeras horas, al igual que su pareja, un adolecente de 17 años y padrastro del niño fallecido, que está en la Comisaría 6 ª de Coronel Bogado a cargo del Juzgado de la Niñez y de la Adolescencia.
Como es menor de edad no puede declarar ante la Fiscalía, pero Colmán explicó que de acuerdo a las diligencias, se decidirá el futuro procesal cautelar del joven. Al final de la jornada, se podría confirmar una imputación.
Según el relato de madre, el niño sufrió una caída y como aparentemente no era de gravedad, le dio de cenar y lo acostó. En un momento, la mujer verificó cómo estaba su hijo, especialmente porque había muchos mosquitos, pero ya lo encontró pálido y con la piel fría.
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La Fiscalía cree que, para entonces, el niño en realidad ya estaba muerto. La madre pidió auxilio a la Policía y a bordo de una patrullera llevó a su hijo al hospital, donde los médicos lo intentaron reanimar sin éxito por 15 minutos.