A raíz de la lluvia caída y la imprudencia de los conductores de camiones pesados, que no respetan la vulnerabilidad del camino, las comunidades ribereñas de San Alfredo, del Departamento de Concepción, de vuelta se encuentran aisladas. Solo tienen salida por agua.
El camino Retiro Alegre-Itacuá, de 30 kilómetros, está cortado por las últimas lluvias registradas y, principalmente, porque dos camiones de gran porte no respetaron la lluvia y se quedaron atascados cerrando la vía, según explicó la profesora Graciela Gamarra, concejala municipal de San Alfredo.
La edil manifestó que hasta una niveladora, que trataba de auxiliar a vehículos pequeños, quedó trancada en el barro sin la posibilidad de salir. Mencionó que esta realidad se repite con cada lluvia y que la población ribereña entera sufre la consecuencia.
Considera que la independencia administrativa sería la solución y que eso depende de la Cámara de Senadores, que debe rechazar el veto presidencial al proyecto de ley de distritación de Itacuá.