Solo el sábado ingresaron 10.500 personas, ampliamente superior a los 7.000 a 8.000 visitantes que se habían registrado en las últimas cinco ediciones, en tanto que ayer la convocatoria fue aún mayor. Todos los locales del patio de comidas se llenaron, aprovechando la concurrencia en el festival de danza.
Los domingos se registran ingresos masivos entre las 14:00 y 17:00 en una primera tanda y luego a partir de las 18:00, mientras que los demás días generalmente las familias llegan al atardecer. Sin embargo, el movimiento es constante, debido a que los expositores tienen sus propias actividades, entre lanzamientos y promociones, desde este lunes, lo que motiva la entrada de empresarios de cada rubro, según explicó el coordinador de la feria, Luis Fleytas.
Las familias además conocieron la producción pecuaria del país en los diferentes galpones, es una oportunidad única, atendiendo a que los animales se producen en zonas alejadas a centros urbanos.
AJUSTES. La organización sigue ajustando cabos sueltos, como la limpieza, las cañerías y el sistema eléctrico que mostraron desperfectos en el arranque de la exposición. Para Fleytas, es natural que se presenten estos inconvenientes que se están subsanando, debido a que el predio estuvo más de dos años sin uso con las dos ediciones suspendidas a raíz de la pandemia.