Desde la Federación de la Producción, la Industria y el Comercio (Feprinco) señalaron que el 2023 estuvo marcado por lo electoral y destacó que la transición fue llevada a cabo con normalidad, pero advirtieron sobre la fragilidad de la democracia.
“Nuestra democracia aun es frágil por la falta de respuesta adecuada a las necesidades de salud, educación, seguridad y transporte público de calidad como elementos mínimos transversales que requieren la prioridad en las políticas públicas; además el respeto a las libertades individuales y a la propiedad privada son claves para el desarrollo económico y el bienestar de las personas”, afirmaron.
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En ese sentido, indicaron que la falta de respuesta a estos reclamos, aleja al sector y la ciudadanía del Estado de derecho y “abre el camino al populismo que busca la lucha de clases con las consecuencias hartamente evidenciadas en los países que han tomado este mal camino”.
“Desde el acuerdo social y económico suscripto en el 2004 entre el sector público y privado aún siguen pendientes los deberes de la mejora de calidad del gasto, la eficiencia del estado y la tan ansiada reforma del mismo, no solo eso, hemos empeorado la gestión y los trámites burocráticos que padece la población desde casi todas las entidades públicas y descentralizadas lo cual permite el avance de la corrupción en estos procesos. Esto se debe principalmente a décadas de falta de inversión en tecnología y mejora de procesos”, cuestionaron.
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También puntualizaron que se consolidó una macroeconomía que es destacada en el exterior y es el pilar para ser previsibles y atractivos a la inversión, pero pidieron que el crecimiento económico llegue más rápido al bolsillo de la gente, es decir, la microeconomía.
“A pesar de los embates que aún tenemos de la pandemia y las largas sequías que fueron importantes golpes al crecimiento económico, los emprendedores de las micro pequeñas, medianas y grandes empresas, es decir los empresarios, hemos redoblado el esfuerzo y junto con todos los colaboradores de nuestras empresas con su grano de arena, pudimos sacar adelante el país”, subrayaron.
Profundizar el diálogo y mejor comunicación
“Vemos auspiciosas algunas de las reformas iniciadas por el gobierno, pero alentamos a profundizar el diálogo y la mejor comunicación, la imposición puede trancar la puesta en marcha de las mismas. Necesitamos continuar un proceso de reforma de la administración pública para dar a nuestra economía una mayor capacidad de crecimiento y sostenibilidad”, aconsejaron.
De igual manera, instaron a aprender de los aciertos y a construir políticas públicas en conjunto, estirando el carro tanto sector público y privado, escuchando y respetando las diferentes miradas.
“Nos preocupan las reformas que generan nuevas instituciones con marcado poder discrecional unipersonal que dependen del gobierno de turno, necesitamos trabajar en conjunto, dando lugar y espacio de interacción real a los diferentes sectores para encontrar la soluciones que nuestro país necesita, muchas de las propuestas que hoy se conocen, no generan esas instancias de coparticipación en la construcción de las políticas públicas y marcos reglamentarios”, cuestionaron.
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Asimismo, aseveraron que no es suficiente crecer a ritmos del 3 o 4% del PIB, ya que el crecimiento de la economía es la herramienta para bajar la pobreza y mejorar el ingreso de las personas generando empleo y trabajo que dignifique a los paraguayos.
“Consideramos de manera indubitable, que, para lograr dicho crecimiento económico a mejores tasas, es sustancial y fundamental el aumento de la inversión directa extranjera. Atraer grandes capitales extranjeros y tecnología deber ser nuestra prioridad”, expusieron.
Desde el sector ven de manera muy positiva la apertura de nuevos mercados para los productos locales, lo que requiere un esfuerzo más focalizado del gobierno con ayuda del sector privado, destacando la reciente apertura del mercado de EEUU para la carne paraguaya, lo que consideran es un claro ejemplo de la importancia del trabajo conjunto.
“La llegada de grandes inversiones a la industria es el camino para dar saltos importantes, como ser la forestal, celulosa y otras que pondrán al país en los principales mercados de capitales”, puntualizaron.
Sobre el punto, explicaron que si bien el procesamiento de oleaginosas mejoró este año respecto al 2022, los niveles de industrialización no han aumentado e inclusive muestran una tendencia a la baja desde el 2018.
“El sector se ha visto afectado por la falta de políticas públicas que compensen las que sí adoptan otros estados para fomentar el agregado de valor dentro de sus fronteras, restringiendo a la agroindustria de la oportunidad de competir en igualdad de condiciones con fábricas de otros países”, recalcaron.
Para la consolidación y aporte al desarrollo del país, sostienen que la agroindustria necesita de políticas públicas claras y estables que permitan al sector seguir creciendo.
“Estas políticas pueden resumirse en cuatro ejes principales: un esquema de equiparación tributaria para la industria aceitera con relación al resto de las industrias que exportan; la lucha frontal y permanente contra el contrabando; seguir trabajando para asegurar la producción sustentable, a modo de que el país se adapte a las exigencias de los consumidores y el establecimiento por ley de un régimen de admisión temporaria para importar materias primas agrícolas que se ajuste a las particularidades de la actividad”, manifestaron.
“El área de comercio y servicio necesita una revolución digital”
Desde la Feprinco calificaron los procesos de apertura de empresas, trámites y permisos públicos como primitivos y como una de las razones de la baja productividad y desaliento a emprendedores. “Países como Colombia han llegado a estándares de 48 horas para procesos de aperturas de empresas totalmente digitales con ayuda de Alianzas público-privadas que son un éxito y deben ser adoptadas”.
“El crimen organizado y la corrupción requieren acciones concretas”
A su vez, ven con mucha preocupación iniciativas parlamentarias que atentan contra inmuebles del estado y aún más peligrosas las iniciativas que buscan bajar las penas por corrupción.
“A las diferentes propuestas ya mencionadas no podemos olvidar la importancia de: Instalar y poner en operación los radares necesarios para el control del espacio aéreo de nuestro país (…) Instalar y poner en operación los escáneres de contenedores en todos los puertos de exportación”, exigieron.
De igual manera, requirieron las acciones necesarias para un combate más efecto al narco negocio en todas sus formas, el tráfico, el crimen y la delincuencia.
“Necesitamos que la Seprelad, la Fiscalía y la Justicia obtengan resultados medibles con los grandes lavadores, no solo con los ciudadanos de a pie que realizan trámites en entidades financieras de plaza. Hoy parecen más bien un sistema de formularios y trámites que frenan a los emprendedores y ralentizan la economía dejando libres y campantes a quienes realmente deben recibir el peso de la justicia”, lamentaron.
Entre otras cosas, reclamaron al fortalecimiento de la Comisión Nacional de Competencia, comprendiendo su misión de promover y defender la libre competencia de los mercados que contribuya al desarrollo económico en beneficio de la sociedad.
“Los lazos con Argentina y Brasil deben solidificarse buscando el respeto a los derechos paraguayos, sin dejar de mirar oportunidades dentro y fuera del Mercosur”, ratificaron.
También reivindicaron potenciar la cultura del trabajo, del coraje de emprender, de la creatividad, del esfuerzo y que el sueño de un joven no sea un empleo en el Estado, que además lastimosamente hoy sigue dependiendo en la mayoría de los casos a situaciones externas a su idoneidad y más a relaciones partidarias que a la vocación, patriotismo y honestidad.
“Nuestro país tiene todas las condiciones para ser un ejemplo de progreso y bienestar, depende de nosotros. Nadie está exento de la responsabilidad por el bienestar de los demás. Renovemos la esperanza de un país mejor, con mayores oportunidades para el trabajo, una mejor salud y bienestar para todos”, finalizaron.
