El presidente de la República, Santiago Peña, asistió ayer a la ceremonia de apertura de clases del Centro de Instrucción Militar de Estudiantes y Formación de Oficiales de Reserva (Cimefor), en la sede de la institución en Mariano Roque Alonso, con la incorporación, por primera vez, de mujeres.
Un hecho que el comandante del Cimefor, coronel Ángel Baruja, calificó como momento trascendental en la historia de las Fuerzas Armadas porque es el inicio de una etapa “marcada por la inclusión, el compromiso y la renovación de valores”.
Inician la formación militar en total 1920 jóvenes: 1045 mujeres y 875, varones.
Para el presidente Peña, este es un momento que marca un antes y un después en la vida institucional castrense. “Por primera vez, hombres y mujeres se forman juntos en este histórico centro de formación de estudiantes para oficiales de reserva, demostrando que los valores de igualdad, respeto y justicia establecidas en nuestra Carta Magna, son los cimientos sobre los cuales edificamos el presente y el futuro de nuestra nacionalidad”.
Dijo que como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación reafirma su compromiso de fortalecer la institucionalidad, y que seguirá impulsando políticas que promuevan la igualdad de oportunidades y la excelencia profesional.
“El día de hoy simboliza el comienzo de una nueva etapa en la historia del Paraguay, en la que hombres y mujeres se unen por un propósito común de prepararse en la defensa nacional, proteger la democracia, construir un futuro de paz y prosperidad para todos los paraguayos”, dijo.
El comandante Baruja valoró que el Gobierno Nacional, “alineándose a las prácticas internacionales sobre la igualdad de género en las Fuerzas Armadas”, haya eliminado las barreras que impiden el acceso de las mujeres a todos los estamentos, autorizando el ingreso de éstas a los Centros de Instrucción Militar para Estudiantes y Formación de Oficiales y Suboficiales de Reserva.
“Hecho histórico que marca un hito en la vida institucional del Cimefor”, refirió, acotando que reivindica la figura y protagonismo histórico de la mujer paraguaya en el quehacer nacional.
“Sin dudas, esta medida fortalece las capacidades de las Fuerzas Armadas, que reconoce plenamente el papel protagónico de la mujer en ese ámbito”, enfatizó.
Explicó que durante seis semanas los aspirantes recibirán entrenamiento en educación física, educación cívica, primeros auxilios, armamento y tiro e instrucción básica de combate.
Al finalizar el periodo, los mismos ascenderán a cabos aspirantes y estarán en condiciones de continuar su formación militar como futuros oficiales de reserva de las Fuerzas Armadas.