Los productos, de la marca Canon, por tratarse de nocivos para el ambiente fueron enterrados en un tambor con cemento. El procedimiento se realizó en Ciudad del Este, como anticipo jurisdiccional de la prueba.
La diligencia fue autorizada por la jueza penal de Garantías Teodolina María de Fátima Burró, por solicitud del fiscal Edgar Benítez, de la Unidad Especializada en Delitos Contra la Propiedad Intelectual y Contrabando.
En el caso está procesado un extranjero identificado como Hassan Madmouh Feahs, quien en su declaración indagatoria reconoció que se trataban de productos espurios, conforme con los antecedentes.
Las mercaderías habían sido incautadas de dos locales allanados denominados Philitronic SA y Centro de las Cámaras, ubicadas en el microcentro de Ciudad del Este.
Conforme con los antecedentes, una comitiva fiscal policial había decomisado de Philitronic S.A. 12 baterías LP-E6 de la marca Canon y 164 cajas vacías con la denominación Canon. En tanto que de Cetro de Cámaras diversas unidades de baterías, tales como LP-ES, LP-E17, LP-E8, NB-7L, NB-11L, NB-21H, NB-3L, NB-10L, NB-5L, NB-22H, entre otras.
El Juzgado resolvió que dichas evidencias deben ser destruidas como parte de un anticipo jurisdiccional de prueba, conforme a lo establecido en el artículo 320 del Código Procesal Penal, dado que estas pruebas resultan irreproducibles y definitivas.