La fiscala del caso, Irma Llano, manifestó a Monumental 1080 que descartó la participación por parte de funcionarios de la Policía Nacional en la emisión del pasaporte a Assad Barakat, sindicado de ser un importante miembro del grupo terrorista Hezbolá en la Triple Frontera.
Barakat fue detenido este viernes en la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, fronteriza con Paraguay.
“Estamos tratando de identificar la responsabilidad dentro de la Secretaría de la Corte Suprema de Justicia. Estamos tomando todas las declaraciones testificales de los funcionarios de la Secretaría y estamos pidiendo cierta documentación”, señaló la representante del Ministerio Público. No obstante, prefirió no dar nombres de los investigados ni de las posibles imputaciones.
Llano mencionó que se encuentran investigando dos casos concretos, el de Assad Barakat y el de Sobhi Fayad, cuyos autos interlocutorios (resolución sobre incidentes), en el primer caso no fue enviado a la Comandancia de Policía y en el otro ni siquiera se realizó el proceso judicial.
“No existe constancia de que se haya recepcionado la notificación en Comandancia de la Policía Nacional. Nunca se dieron por notificados de este AI que emitió la Corte Suprema de Justicia”, insistió la fiscala.
Barakat se encuentra imputado por producción de documentos no auténticos. El detenido obtuvo una carta de naturalización paraguaya en 1989, otorgada por la Corte Suprema de Justicia. Luego, en el 2007, la máxima instancia judicial resolvió cesarle la nacionalidad.
El supuesto líder criminal perdió la condición de ciudadano paraguayo, pero en abril de este año se le otorgó igualmente el pasaporte. El documento se retiró de la oficina regional de Identificaciones de la Policía Nacional en San Alberto, Departamento de Alto Paraná.
Llano, además, manifestó que se encuentran investigando la razón por la que el sospechoso utilizaba el pasaporte paraguayo.
Según la fiscala, los antecedentes más llamativos de los libaneses están relacionados con el atentado de las Torres Gemelas, el 11 de septiembre del 2001, en Estado Unidos, ya que supuestamente, en ese entonces, tanto Barakat como Fayad habían transferido una cantidad de dinero considerable a la agrupación de Hezbolá en el Líbano, por lo que se les considera financistas del grupo.