El fiscal anticorrupción Leonardi Guerrero, quien interina a su par Belinda Bobadilla, pidió el sobreseimiento provisional para Tomás Rojas Cañete, alias Toma’i, conocido líder narco, quien está imputado por supuesto lavado de dinero, tras vender un inmueble que era para comiso.
En el 2011 se había decretado la inhibición general de gravar sobre los bienes de Rojas (restricción de vender, trasferir o gravar), tras procesarle por posesión, tráfico de drogas y asociación criminal.
Pese a estar privado de su libertad, en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, y a sabiendas de que el inmueble tenía prohibición de vender, Rojas habría vendido en el 2013 la propiedad ubicada en Ciudad del Este.
Luego de unos años, él fue condenado por narcotráfico, pero no se pudo realizar el comiso sobre esa propiedad, ya que se encontraron con que el inmueble estaba a nombre de otra persona, en este caso de Marcial Cabrera Vera.
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“La venta realizada en octubre de 2013 habría sido con intención de retirar del patrimonio del señor Tomás Rojas Cañete un inmueble que se encontraba a su nombre y con el propósito de evitar que el mismo fuera decomisado”, es la sospecha del Ministerio Público.
El pedido de sobreseimiento provisional, es a raíz de que la Fiscalía todavía no existe una “certeza plena” para acusar por lavado de dinero y pedir juicio, ya que se requieren todavía de pruebas.
Ordenan detención de la ex escribana
La entonces escribana Mirna Aldama, quien protocolizó la compra venta, tiene orden de detención en la causa y se espera que pueda presentarse a declarar. Fue llamada tres veces antes, pero no se presentó.
Supuestamente, ante ella tanto Rojas, como su esposa Zulma Ramona Dávalos, se presentaron el 23 de octubre de 2013. También compareció Leonardo González quien adquirió el inmueble a favor de otra persona (Valdir Sacomori), pagando G. 600 millones.
Sin embargo, para la Fiscalía, sería “imposible” que Rojas se haya presentado en la escribanía, ya que en ese entonces el líder narco estaba privado de su libertad.
Ya en el 2017, Sacomori renunció a sus derechos de la posesión a favor de Leonardo González. Este, ese mismo año, vendió nuevamente la propiedad a Marcial Cabrera, por G. 400 millones.
La hoy ex escribana, a quien se le canceló su registro, y quien actualmente está siendo investigada por uso y producción de documentos de contenido falso, había entregado todas sus documentaciones que están resguardadas en los archivos de la Corte Suprema de Justicia, sin embargo, entre ellos no se encontraron documentos del 2013, incluyendo la transacción del inmueble en cuestión.
La Fiscalía espera en este plazo, del sobreseimiento provisional, tomar su declaración, obtener el protocolo original de la escritura de compra-venta y hacer una pericia caligráfica de las firmas.