Se trata de Catalina Martínez, quien se dedica a la venta de flores en el cementerio municipal del antiguo barrio Recoleta, en Asunción. La misma desde hace años se ocupa de los gatitos que se encuentran en el camposanto.
El puesto de ventas de flores de la mujer se encuentra ubicado sobre la avenida Mariscal López, al lado de la iglesia católica de la Recoleta.
Según los pobladores de la zona, ella siempre recibe a sus clientes con un trato amable y cordial, pero lo que más destacan de la mujer es el gesto que tiene con los gatitos que se refugian en el cementerio.
De su propio dinero costea las comidas de los animales, incluso los gastos veterinarios. Una de las mascotas que viven en el sitio desde hace tiempo es Cacho, quien acompaña a Martínez desde pequeño, relataron conocidos de Martínez.
Además, mencionaron también a Micaela, una gata que pertenecía al fallecido sacerdote Benito Páez, ex párroco de la parroquia de la Recoleta, quien antes de su fallecimiento pidió a Catalina Martínez hacerse cargo del animal.
Por el noble voluntariado que realiza Martínez, vecinos del lugar invitan a adquirir las flores de la mujer al visitar el camposanto municipal.