Además, Cramer sostuvo que las entidades se esfuerzan en la comunicación con los clientes a través de todos los medios disponibles para concienciar y explicar las modalidades empleadas por los delincuentes, y que invierten de forma constante, tanto en recursos tecnológicos como humanos y en capacitaciones, para hacer frente a los hechos de esta clase que se reportan.
“Los fraudes electrónicos se están produciendo con una frecuencia importante debido al aumento de las actividades económicas digitales. Conforme aumenta la digitalización de la banca, es inevitable que surjan nuevos casos. Además, somos conscientes de que un segmento importante de la población necesita fortalecer sus habilidades digitales. Por ello, damos mucho énfasis a las campañas comunicacionales desde la asociación y sus miembros. Es importante recordar que ningún banco solicita el PIN ni pide ingresar datos en formularios o enlaces sospechosos. Por ejemplo, el cliente tiene la opción de cortar la llamada ante cualquier contacto sospechoso y asegurarse previamente de que el contacto es realizado por su banco”, dijo.
impacto. A su vez, comentó que las acciones que emprenden los bancos están orientadas a “minimizar el impacto” y a combatir las distintas metodologías y sistemas que los delincuentes ingenian. “Sin embargo, creemos que lo realmente importante es que los clientes conozcan qué información es sensible, qué les va a solicitar su banco y qué nunca se les pedirá”, sostuvo.