El 8 de junio de 1979, el tenista paraguayo Víctor Manuel Pecci derrotó espectacularmente al estadounidense Jimmy Connors en el célebre campeonato de Roland Garrós, en Francia, ubicándose para disputar la final ante el sueco Björn Borg, el siguiente domingo.
Con esfuerzo y tesón, el entonces joven deportista paraguayo se había labrado un camino de gloria en el tenis mundial. La fotografía de aquella victoria fue transmitida por la agencia AFP desde Francia, e incluida en a portada de Última Hora, que aparecía esa misma tarde, con un gran titular: "¡Hazaña de Pecci: ganó a Connors!”.
El clima de algarabía por los logros del gran deportista contrastaba con los aires represivos que se cernían desde el Gobierno dictatorial contra la prensa paraguaya. En pocos días más, el Ministerio del Interior, a cuyo frente se encontraba el ministro Sabino Augusto Montanaro, dictaría una arbitraria resolución, ordenando la suspensión de las ediciones de los diarios Última Hora y La Tribuna, por 30 días, como castigo por su línea periodística crítica.