Por Andrés Colmán Gutiérrez
@andrescolman
Alfredo Duarte se encontraba trabajando en una oficina comercial, en el centro de Washington, en la tarde del miércoles 15, no lejos del edificio del Capitolio, sede del Congreso estadounidense, cuando escuchó el sonido de un pequeño helicóptero que sobrevolaba el histórico edificio.
Rápidamente, el fotógrafo tomó su cámara y salió a la calle. “Mi olfato periodístico me decía que allí había una noticia para fotografiar”, relata Alfredo.
Se trataba un minihelicóptero tripulado que sobrevoló el Mall de DC y aterrizó en uno de los jardines del Capitolio, a la 1.15 pm de la tarde, hora local. La Policía detuvo inmediatamente al tripulante del aparato.
“El hombre fue identificado como Doug Hughes, de 61 años, cartero de Florida cuya intención era repartir cartas en el Congreso para protestar por la corrupción y urgir a los legisladores a emprender una reforma fiscal. El helicóptero, del tamaño de una bicicleta, descrito como un “gyrocopter” aterrizó en el lado oeste del Capitolio a alrededor de la 1.15pm”, describe el periódico en castellano El Tiempo Latino, donde Alfredo colabora como reportero gráfico.
“Yo estaba frente al Capitolio y el hombre voló sobre mí, cruzó el ‘reflecting pool’ (el monumento de agua a modo de piscina en el Mall Nacional) y aterrizó en el jardín”, narra Alfredo.
Se vio descender al hombre y acercarse a dos miembros de la seguridad del Capitolio. De inmediato, la Policía lo arrestó y rodeó el lugar con cinta amarilla para investigar, añadió Duarte.
“La aparición del objeto volador tripulado causó conmoción en el Mall, sobre todo cuando se acercó al Capitolio. Visitantes y peatones miraron hacia el cielo y observaron cómo descendía al aproximarse al edificio de la legislatura federal estadounidense”, narra el reporte periodístico.
“Tomé varias fotos, pero a los editores de El Tiempo Latino les gustó una en particular, en donde se ve al helicóptero dirigiéndose hacia la cúpula del Capitolio, que actualmente está en refacciones”, cuenta Alfredo.
Al advertir la alta calidad de la imagen, los editores de El Tiempo Latino la ofrecieron también a los del diario Washington Post, que integran la misma cadena de medios. Los directivos del prestigioso periódico norteamericano entendieron que era la foto del día y decidieron usarla como su imagen principal, otorgando todo el crédito al reportero paraguayo.
“Un sueño largamente acariciado”
“A mí me avisaron que el Washington Post iba a publicar mi foto en portada, pero pensé que iba a ser una foto pequeña, secundaria. Este jueves a la mañana, cuando salí de casa y pasé por un puesto de periódicos cercano, vi la tapa del Post y no lo pude creer. ¡Mi foto agarraba toda la cabecera!”, cuenta emocionado Alfredo por teléfono, desde la capital estadounidense.
Casualmente, el miércoles 15 se cumplían exactamente 12 años desde que Alfredo había llegado a Estados Unidos para quedarse, en busca de labrarse un camino como fotógrafo profesional, tomando cursos de especialización y ofreciendo sus servicios a medios hispanos.
“Sabía que en algún momento lograría publicar en un medio importante, pero ver mi foto en la tapa del Post es muy fuerte, es la coronación de un sueño. Creo que abre una nueva etapa para mi carrera”, reconoce.
Alfredo empezó a trabajar en ÚLTIMA HORA en los años 90, siendo aún adolescente, como auxiliar de la sección de Fotografía con el entonces jefe de la sección, Jorge Adorno.
Fue el primer fotógrafo especializado en producción de modas y fotografía artística para la revista VIDA desde su primera edición, en la que realizó obras de gran valor estético y obtuvo varios premios, hasta que en el 2003 anunció su decisión de viajar a Estados Unidos, a mejorar su capacitación y abrirse camino como fotógrafo.
Desde el país del norte se mantiene como colaborador de ÚLTIMA HORA y recientemente realizó coberturas en directo del partido de la selección paraguaya de fútbol en Kansas City.