Luego de cuatro horas de debate, los representantes de la Coordinadora Nacional Intersectorial (CNI) salieron “tal como entraron”, según las palabras de los propios dirigentes.
El Gobierno convocó ayer a una reunión en la sede del Crédito Agrícola de Habilitación (CAH), liderada por el ministro de Agricultura y Ganadería Denis Lichi, acompañado por representantes del CAH, el Banco Nacional de Fomento (BNF) y miembros del Poder Ejecutivo.
Jorge Galeano, dirigente de la CNI, reconoció que el punto de desencuentro fue el tema del plan de reactivación productiva.
Recordemos que este plan es uno de los 4 puntos que forman parte del acuerdo firmado en marzo, luego de días de vigilia en Asunción.
Galeano dijo que trabajaron ese plan con otros representantes del Gobierno, entre los que nombró al viceministro de Agricultura Nicasio Romero. Este plan tiene un plazo de 4 años de aplicación y un presupuesto de USD 41 millones.
Grande fue su sorpresa cuando ayer durante el encuentro, el ministro Lichi les dijo que solamente se cuenta con un fondo de USD 1 millón. “En el Renaf (Registro de Agricultura Familiar Campesina) hay 50.000 personas, es decir, correspondería una inversión de G. 112.000 para cada uno en un año, ¿qué se puede hacer con eso? Eso es asistencialismo”, señaló visiblemente molesto.
Denunció además que los agentes de la Policía Nacional grabaron toda la reunión y también impiden que los manifestantes apostados en los alrededores del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) utilicen los baños químicos instalados en la Plaza de la Democracia.
A su vez, Lichi dijo que hubo avance tras esta reunión porque acordaron hacer un documento con los términos de la compra de deudas, otro de los puntos del acuerdo de marzo. Tras la firma de este nuevo documento, los campesinos entregarían la lista de los posibles beneficiados. Coincidió en que la traba fue el dinero para el plan de reactivación. Prometió otra propuesta en las próximas horas.
