El papa Francisco determinó la expulsión del sacerdocio de un cura chileno que se encuentra bajo investigación en un caso de abuso sexual contra menores, informó el arzobispado de Santiago, en medio de un creciente número de denuncias que han sacudido a la Iglesia Católica Romana.
En un comunicado difundido en su página web, el Arzobispado de Santiago dijo que el Papa había decidido la dimisión del estado clerical y la dispensa de todas las obligaciones vinculadas a la ordenación del sacerdote Cristián Precht. La decisión fue tomada por el Papa el 12 de setiembre y que es inapelable.
Precht fue líder de la Vicaría de la Solidaridad en Chile, una rama católica conocida por la defensa de los derechos humanos durante la década de 1980, cuando gobernaba el ex dictador Augusto Pinochet bajo cuyo mandato más de 3.000 personas murieron o fueron desaparecidas.
El líder religioso ha sido acusado de abuso sexual como parte de una investigación de abusos vinculados a la orden de los Hermanos Maristas. Precht ha negado los cargos.
Mafiosos. El papa Francisco, que viajó el sábado a Palermo para rendir homenaje a un cura siciliano asesinado por la mafia hace 25 años por intentar alejar del consumo de drogas a los jóvenes de un barrio pobre, insistió ante la población que los mafiosos no eran cristianos.
“No se puede creer en Dios y ser mafioso. El que es mafioso no vive como cristiano, porque blasfema con su vida el nombre de Dios-amor”, declaró durante una homilía al aire libre en el barrio del puerto de Palermo, capital de la católica Sicilia, donde le esperaba una multitud de 100.000 personas.
“Hoy necesitamos hombres y mujeres de amor, no hombres y mujeres de honor, de servicio y no de abuso”, aseguró, haciendo un llamamiento a los mafiosos: “¡Cambiad! Dejad de pensar en vosotros mismos y en vuestro dinero, convertíos”.
Francisco retomaba así el mensaje de Juan Pablo II que, durante una visita a la ciudad siciliana de Agrigento en mayo de 1993, pidió a los mafiosos de la Cosa Nostra que se convirtieran. Los padrinos sicilianos respondieron dos meses después con atentados contra dos iglesias. reuters-afp