Alejandro Buzó, jefe del Departamento de Prevención contra Incendios de la Municipalidad, contó a Última Hora que la Fiscalía impulsará una investigación para dar con los responsables.
“Estamos hablando de delincuentes que están iniciando fuego, sea por inconsciencia o con premeditación, y esto está superando la capacidad de las organizaciones y las instancias que trabajan en materia de prevención”, advirtió.
Comentó que se debe comenzar a debatir acerca del problema grave que esto representa para la seguridad de las personas y el medio ambiente. “Tenemos que recordar que en los últimos meses hubo tres intentos de provocación de incendios en el Mercado 4. Ahí no hay problemas eléctricos, sino tres personas diferentes ingresaron para tratar de provocar incendios en estas zonas. Lo mismo está pasando justamente en estas zonas de gran amplitud y que generan este tipo de episodios”, comparó Buzó.
“Entonces, yo creo que el debate, más allá de prevención, ya tiene que ser más amplio, tiene que ser mirado como una problemática de seguridad pública”, añadió.
Los focos registrados el domingo avanzaron con mucha velocidad durante horas de la mañana, en parte debido al viento fuerte y la sequedad del pastizal, indicó Derlis Giménez, personal de la Armada.
“Justo en la zona del ingreso del Club Mbiguá, avanzando un poco más por la Costanera, tenemos dos nuevos focos que se están combatiendo, aparte de los otros cuatro focos que se estaban combatiendo desde la mañana del domingo”, reportó a su vez el jefe de prevención contra incendios de la Comuna.
El incendio se avivó, hasta donde se pudo constatar, por causa de la acumulación de residuos. El humo negro expedido por el fuego tuvo una relación directa con el material combustible, los residuos de plástico, las cubiertas acumuladas, según detalló Buzó.
“La parte de los vertederos, en la zona de los recicladores, es en donde se generó una propagación mucho más intensa del fuego y es lo que se está combatiendo todavía”, dijo cerca de las 16:00 del domingo, cuando los más de 200 bomberos seguían trabajando en la zona.
Unas 12 familias fueron derivadas al Club Mbiguá, donde se instaló un albergue con apoyo del Ministerio de la Niñez, según informó Arturo Borne, jefe de Gestión de Riesgos de la Comuna.