Fuerte suba de los precios devoró el último ajuste del salario mínimo

La inflación medida por el índice de precios al consumidor (IPC), pese a la pausa puntual que tuvo en diciembre, cerró el año pasado en una variación positiva de poco menos 7%, casi 1% por encima del techo del rango meta del Banco Central del Paraguay (BCP) y en su nivel más elevado desde el año 2010.

La dinámica de los precios se mostró fuertemente al alza, sobre todo desde el segundo semestre del año pasado, conforme a los registros de la banca matriz, lo cual también afectó notoriamente el poder adquisitivo de las personas. Al respecto, cálculos de la consultora CPA Ferrere refieren que el salario mínimo legal vigente en términos reales (monto nominal menos inflación) se ubica por debajo de los G. 2 millones, en una referencia similar a la que se tenía entre los años 2016 y 2017 (ver infografía).

“El salario mínimo en términos reales se ubica por debajo del nivel previo al ajuste del julio 2021, es decir el reciente repunte de los precios ya absorbió dicho ajuste”, explicó al respecto Patricio Goto, economista de CPA Ferrere. Agregó que el deterioro de los salarios en nuestro país es perceptible considerando que los bienes con mayor incremento de sus precios fueron los alimentos, que se constituyen como el principal componente de la canasta de consumo de los paraguayos.

efecto. Al ser consultada sobre cuáles son los efectos de esta situación, Goto enfatizó el hecho de que la pérdida de poder adquisitivo actúa como una restricción a la recuperación de la demanda (tras la fuerte caída registrada en la época más dura de la pandemia) y se posiciona como un factor condicionante para el efecto, teniendo en cuenta que las personas ganan menos de lo que hacía anteriormente en términos reales. “En adelante hay que tenerlo en cuenta como una restricción para esa reactivación que se está esperando, sobre todo para esos bienes más elásticos a la pérdida de ingresos”, dijo.

Asimismo, indicó que en el 2022 se espera que el ajuste del salario mínimo (que se realiza usualmente a mediados de cada año) sea relevante, de manera a recoger el impacto de la alta inflación de los últimos meses sobre los ingresos. “Habría que considerar que esto va a representar un incremento en los costos de los empresarios, que van a tener que subir el salario con base en esta pérdida del poder adquisitivo, como sabemos la ley lo que establece es que el salario mínimo se ajuste de acuerdo con la inflación interanual al cierre de junio de cada año”, señaló.

“Eso va a representar un golpe nuevamente para la estructura de costos de cualquier empresario que tiene en su plantel gente que tiene salario mínimo. Igualmente, el salario mínimo es una referencia, en general esto está pasando con todos los ingresos de las personas”, añadió.