Varias ciudades del Departamento Central fueron afectadas por un fuerte temporal con granizos de varios tamaños que se registró durante la noche del lunes y madrugada de este martes.
Se reportan árboles caídos, daños materiales y varios alimentadores de la ANDE fueron afectados.
Según registros de la Dirección de Meteorología, los vientos alcanzaron los 81 kilómetros por hora en distintos puntos de Central. El intenso fenómeno sorprendió a varias familias que ya se encontraban descansando.
Los granizos causaron daños en viviendas, en plantaciones y también provocaron diversos daños en vehículos.
“En mi vida vi algo así. Cayeron hielos y uno de los pedazos llegó a pesar medio kilo. Fue una noche de terror”, relató Florentino, un poblador de la ciudad de Capiatá. El hombre manifestó que en la zona se registraron muchas viviendas afectadas, principalmente, el techo.
En medio del susto y la desesperación varias familias buscaron la manera de proteger sus pertenencias y resguardarse, ya que los granizos afectaron a los techos de varias viviendas.
Desde la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) informaron que gran parte de los alimentadores afectados ya están funcionando. Sin embargo, persisten algunos problemas puntuales en Lambaré, Itauguá y Villa Elisa.
“Gran parte de los alimentadores afectados ya están en funcionamiento. Tenemos problemas puntuales en algunas zonas de Lambaré, 4 Mojones, Itauguá, Villa Elisa y San Antonio”, indicó a Monumental el ingeniero Esteban Cabrera, jefe de Operaciones de la ANDE.
Precisó que alrededor de 60.000 usuarios se quedaron sin el servicio de energía a lo largo de la madrugada, pero actualmente son unos 6.000 los afectados. Los fuertes vientos dejaron a su paso varios cables sueltos, detalló.
Cabrera señaló que cuentan con un protocolo para trabajar luego de una fuerte tormenta. El procedimiento comienza con trabajos para reponer los alimentadores, luego ver las derivaciones, controlar el estado de los transformadores y por último los reclamos puntuales.