La fiscala Carolina Martínez procesó a Pablo Sebastián Ayala y a Pastor Salcedo Sanabria porque realizaron la inhumación a las 18:00 del 10 de abril pasado.
Tras una llamada a la Policía Nacional por parte de los vecinos, quienes estaban temerosos, efectivos llegaron hasta el camposanto de la Comuna, sobre la calle Curupayty casi Virgen del Rosario de la ciudad de Capiatá.
Ahí también comprobaron las irregularidades en atención al horario, pasadas las 17:00, hora de cierre.
Se constató además que estos no contaban con la autorización por parte de la Municipalidad y el asesor jurídico de la Municipalidad, quien fue a declarar, expresó que no contaban con la orden de trabajo.

El funcionario Pastor Salcedo se encontraba en el lugar junto con otras dos personas, quienes expresaron ser hijos del difunto (71).
Estas dos personas presentaron además un acta expedida por el Hospital del Cáncer, ya que el señor habría fallecido de esa enfermedad.
Los dos procesados fueron demorados y se presentaron ante la Unidad del Ministerio Público, en donde fueron convocados a prestar declaración indagatoria, pero se abstuvieron de hacerlo.
Posteriormente, la fiscala Carolina Martínez procedió a imputarlos.