Tras conocerse ayer el resultado de la votación en la Cámara de Diputados a favor de la aprobación de la ley que aumenta a diez años la condena por invasión de propiedades, manifestantes autoconvocados atacaron el local del Indert en Yasy Kañy, Departamento de Canindeyú, arrojando bombas molotov, lo que provocó un incendio que destruyó gran parte de las documentaciones.
También quemaron dos tractocamiones que se encontraban sobre la ruta aguardando poder cruzar y una camioneta.
Por varias horas, los campesinos mantuvieron en vilo inclusive a comerciantes del cruce Yasy Kañy y a los propietarios de estaciones de servicios que se encontraban en la zona, ante las amenazas de que también incendiarían esos locales. Quienes protestaban arrojaron además bombas molotov a los bomberos voluntarios que llegaron hasta el sitio para sofocar el incendio en el local del Indert, Infona y también en los camiones y camioneta siniestrados en plena ruta.
La policía no logró que los manifestantes se replegaran ni pudo impedir que estos quemaran una caseta policial que se encontraba en dicho lugar. Por otra parte, indígenas de varias comunidades de este departamento se concentraron desde el lunes sobre el puente del río Curuguaty, donde apilaron troncos de madera y ayer amenazaban con quemar la pasarela, lo que hubiera dejado incomunicadas a varias comunidades.
En San Pedro, la ruta PY08 tuvo cinco bloqueos; en algunos de ellos de hasta cuatro horas y provocaron una kilométrica fila de vehículos tanto hacia la capital como hacia el Norte del país.
Los manifestantes decidieron unificar la protesta en un solo lugar o por departamento para luego viajar hacia Asunción para presionar y evitar que el Ejecutivo promulgue la polémica ley.