Uno de los cajeros corresponde al Banco Nacional de Fomento (BNF) y el otro es del Banco Atlas.
De momento se desconoce la suma de efectivo que los delincuentes se llevaron, mencionó el comisario César Silguero, jefe del Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado.
La investigación refiere que el sistema de tintado de seguridad de los dos cajeros no se activó, porque, aparentemente, los malvivientes extrajeron previamente, los cofres a través de una abertura que hicieron en la máquina con un soplete. Luego dinamitaron los cajeros y detonaron, causando importantes destrozos.
Las máquinas quedaron prácticamente destruidas con la explosión y varios billetes quedaron esparcidos alrededor. En ellos se podía notar que no se habían manchado con la tinta del sistema de seguridad.
INVESTIGACIÓN. El comisario Silguero manifestó que los asaltantes llegaron hasta el sitio en dos vehículos. Una camioneta Toyota Hilux y un automóvil Toyota IST, que fueron abandonados pocos minutos después en la zona.
Otra camioneta Hyundai Santa Fe también fue encontrada abandonada en una zona despoblada de la ciudad de Villa Elisa, con algunos billetes a su alrededor. Todos los vehículos fueron denunciados recientemente como robados y están siendo analizados por peritos de la sección Criminalística.
Los investigadores de la Policía presumen que los autores del robo serían parte de una banda criminal integrada por brasileños. Esto, debido a que testigos los escucharon conversar en portugués a los delincuentes.
Además, se manejan datos de que la gavilla habría estado en los dos días anteriores al atraco, en ese mismo horario de la mañana, como verificando toda la zona. Estos datos están siendo analizados y cotejados por los agentes, mediante filmaciones de circuitos cerrados del local comercial y alrededores.
ENTINTADO. Entre los años 2014 y 2015 hubo un total de 24 atentados con explosivos contra cajeros automáticos. A fines del 2015, en más de 1.500 unidades de ATM de todo el país se colocaron los dispositivos de entintado que se activan por sensores. Esta medida implementada deja inservibles los billetes que hay en ellos. Desde entonces, en dos ocasiones intentaron violentar los cajeros, pero los billetes quedaron manchados.