El Gobierno de Horacio Cartes decidió cancelar el proyecto de maquinización de la represa Yguazú que contaba con el financiamiento de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA). El Gobierno nipón había otorgado al Paraguay un préstamo total de USD 200 millones en el 2006, bajo la administración de Nicanor Duarte Frutos.
Víctor Romero, presidente de la ANDE, explicó que la construcción de la central se volvió inviable porque el costo del emprendimiento ya superó el planificado inicialmente por la estatal eléctrica. El costo calculado fue de USD 260 millones para realizar los cinco lotes de los que constaba el proyecto. La ANDE aportaría los USD 60 millones restantes. Sin embargo, la reciente oferta hecha por el Consorcio Yguazú (integrado por las firmas Camargo Corrêa y Talavera & Ortellado) fue de USD 252 millones (impuestos incluidos) y solamente para el Lote 2, que son las obras civiles e hidromecánicas.
Por tal motivo, Romero dijo que declaró desierta la licitación para adjudicar el Lote 2. Es la segunda vez que se declara desierto este llamado, por lo que también ya se da por terminado el proyecto de la central Yguazú, al menos bajo las actuales condiciones. Al final, el costo total de la obra llegó a superar los USD 350 millones. Ahora, el préstamo tiene que ser devuelto al Gobierno japonés, tras nueve años de indefiniciones.
“Hubo muchos inconvenientes en su ejecución y llegamos a un punto en el cual el Gobierno Nacional considera el proyecto, así como está, inviable. Ya se ha hecho la comunicación al Gobierno japonés y a la Cancillería Nacional”, expresó.
Afirmó que es necesario realizar obras de generación de energía, por lo que en el futuro se puede reactivar el proyecto de la central de Yguazú. Para el efecto, se tendrá que buscar otro diseño y otra fuente de financiamiento. Los contratos que se firmaron se rescindirán y ahora se evaluará si tendrá un costo extra para la ANDE, infirió Romero.
A MEDIAS. El Lote 1 del emprendimiento, que corresponde a la construcción del camino de acceso a la central, de 16 kilómetros, y una línea de distribución de 23 kilovoltios (kV), desde la Subestación del kilómetro 30 hasta el sitio del proyecto, ya fue terminado años atrás. Requirió una inversión de aproximadamente USD 3.500.000. Además, se había pagado casi USD 10 millones en consultorías, según expresó Ronaldo Zelada, gerente técnico de la ANDE.
También se llegó a firmar el contrato con el consorcio Toshiba Corporation Mitsui & C. Plant Systems para el Lote 3 (equipos y montajes de turbinas), pero no se desembolsó dinero, indicó el gerente.
Añadió que se han utilizado, aproximadamente, USD 12 millones del crédito japonés y ahora se debe hacer el cierre financiero para determinar realmente cuánto del préstamo se ejecutó y cuánto aportó la ANDE, con el fin de reembolsar el dinero a los asiáticos. Zelada señaló que, más allá de haberse cancelado el proyecto, la obra del Lote 1 ya queda para el futuro, si se reconsidera impulsar la maquinización de la presa Yguazú.
ACERTADO. Hugo Lesme y Ramón Montanía, especialistas del sector energético, que estaban en contra de la maquinización de la represa, manifestaron que la decisión del Gobierno de Cartes fue muy acertada porque este proyecto implicaba un costo muy alto para muy poca generación de energía (183 GWh al año).
Aseguraron que el país tiene más prioridades y el sistema de distribución es una de ellas.