El contraalmirante Cíbar Benítez, ministro del Consejo de Defensa Nacional (Codena), reconoció que quieren evitar que la DEA corte relaciones y que pudo haber sido un error el actuar del Gobierno. Por ese motivo, remitieron una nota ayer en la que aclaran que se deja sin efecto la intención de la Senad de culminar la cooperación. El llamativo argumento es que la institución no conocía el convenio del 2022 del Estado paraguayo con la DEA.
Este convenio fue recordado por la misma agencia y Benítez afirmó que ese documento no estaba entre los archivos de la Senad.
En la desesperación por salvar la crisis, el Gobierno pidió abrir una mesa de negociación y se ratificó plenamente en el convenio del 2022, pero incluyendo a Seprelad, y no perder la cooperación en la lucha contra el crimen organizado.
Tras el impasse, el Ejecutivo ahora quiere hasta ampliar la cooperación incluyendo la ayuda para Seprelad y Dirección de Ingresos Tributarios. “No teníamos la nota (el convenio del 2022), no es culpa de la Senad actual que no se tenga el archivo. Esa nota vino adjunta a la nota de contestación de la DEA, eso fue firmado por autoridades nuestras anteriores a la actual”, argumentó el ministro de Codena.
El ministro explicó que la DEA tiene una oficina regional ubicada en Perú y que hay agentes en Paraguay. Sostuvo que el país necesita de la cooperación por su aporte en tecnología y capacitación.
“La nota dice que empezarían a retirar sus cosas o ver el inventario que tienen. Puede ser también un atroz error (del Gobierno) o un papelón, como digan ustedes, pero reitero que no hubo intención, solo se quería tratar de reorganizar”, explicó Cíbar.
El cartismo tenía la intención de disminuir la acción de la DEA en el país hace mucho tiempo y la victoria de Donald Trump fue un elemento que motivó a emprender las primeras movidas.
Esto se hizo notar tras la muerte de Lalo Gomes en un operativo coordinado con la SIU. El diputado Yamil Esgaib impulsó un proyecto para su eliminación que no prosperó y el sábado 7 de diciembre, Jalil Rachid, comunicaba junto con Enrique Riera la interrupción de la cooperación y la centralización de todas las operaciones en la Policía Nacional. Pero el contraalmirante negó ayer que las acciones del gobierno tengan que ver con la muerte en Pedro Juan Caballero del legislador acusado de narcotraficante.
Varios referentes políticos manifestaron que Jalil debería renunciar, ya que la jugada estuvo mal diseñada y ahora el gobierno debe intentar recomponer relaciones con la DEA.
Nuevos términos. El Gobierno tenía intención de renegociar el convenio con la DEA, pero la estrategia de cortar la cooperación con la Senad fue una mala jugada que no saben cómo solucionar.
Todavía se desconocen los términos de la renegociación, pero antes de esto, el objetivo era que la coordinación esté centralizada, ya no separada entre instituciones, y que el liderazgo recaiga en Paraguay, por principios de “soberanía”. Además, con la inclusión del Consejo de Defensa Nacional, también habría intervención militar.